Mi destino

Desconocidos

Pasé 1 año escondiendo me de todos, esperando mi destino. No quería estar ensenada asique desidí salir de ese cuarto de porquería, el cuarto que tenia en Azarath era enorme y por eso odiaba ese cuarto. Me puse la ropoa típica que usan en la tierra: camisa negra, un pantalón corto gris con un leotardo negro, botas azules y una camisa azul de botones abiertos encima.

Cuando salí estaba el conserge afuera y me miro totalmente sorprendido de que por fin salia de ese cuarto, luego cogió la escoba; fingió que estaba barriendo y entro a mi cuarto.

El tipo debía de estar loco si pensaba dejar que entrara a mi cuarto, ahí tengo todo tipo de cosas mágicas y libros peligrosos. Quería mandarlo a otra dimensión. Me transporte a mi cuarto y grite-

-¡Hey!

-¡Ah!- grito al verme y añadió- Pero yo creí, creí que usted se había ido... Jeje... Dijo tratando de cubrir lo que pensaba hacer. Quise leerle la mente para tratar de ver lo que ese idiota estaba pensando, y si pudieran ver lo que vi... Ja... Es un pervertido.

-Sí, así fue pero no entre a mi cuarto , ni tu ni nadie ¿ok?- él se me quedo mirando con curiosidad.

-¿Sus ojos son violeta?- me eche para atras y serre la puerta empujando al conserje.

-Ah... No, son lentes de contactos...- Osea obvio. En realidad estaba mintiendo ya que no podía y no quería ponerme lentes de contactos.

-"Bueno, se te ven hermosos."- puso una cara de seducción al parecer pero lo único que pude seducir fueron las ganas de salir con más prisa. "Enserio", eso era lo único que mi cara reflejaba.

Finalmente me transporte a la salida donde estaba la recepcionista y no se porque se sorprendió más, porque vio que al fin salí de el cuarto o que allá salido de la nada.

Al fin salí de ese lugar tan pequeño y me adelante a una cafetería. Había un hermoso atardecer. Me sentía tranquila, relda como si estuviera meditando, se podía decir que estaba feliz pero de repente vi a unas chicas señalando hacia el cielo. Me asome para ver que era, lo que pude ver fue una luz verde y venia muy rápido. Todos salieron corriendo y gritando pero yo me quede ahí sin miedo, esperando. Sin avisar alguien me cargo y brinco al otro lado de la carretera.

-"¿Estas bien?"- me pregunto el desconocido y me puso en el suelo. Asentí con la cabeza. Trate de ver su cara pero tenia una máscara. Me dieron ganas de arrancarle la máscara del rostro para ver si le dolia.