Brusquedad

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Thor había llegado por mi tal como lo predije, igual de brutal y salvaje, me tomo del cuello de la ropa y me jalo hacia afuera de la nave. Antes de tocar tierra me lanzo a ella sin delicadeza alguna.

- Auch! Cuidado que me lastimas – igual que la bestia que recuerdo

- ¿Dónde está el Tesseracto?

- Estoy bien, no tienes por qué preocuparte – levante mi mano meciéndola

- ¿Tengo cara de querer bromear? – sonaba fastidiado, pero más que nada molesto

- No sé, dímelo tu – trate de sentarme con dificultad

- Contesta ¡!!

- Me pregunto cómo habrá hecho padre de todo para enviarte aquí, digo el bifrost está destruido, tú lo destruiste – se me acerco y me levanto, mas rápido de lo que yo pude hacerlo, me tomo el cuello de mi ropa y me acerco a el – oye deberías dejar de jalarme la ropa, es una muy mala costumbre

- Te creí muerto- que conmovedor

- ¿Me extrañaste?

- No solo yo, nuestro padre...

- Tu ...padre – me soltó la ropa

- ... - él ya lo sabía no podía negármelo,

- Te digo mi origen, ¿no es así? – me aleje de él, me dolía mucho la espalda, este imbécil

- Ambos crecimos juntos, jugamos juntos, peleamos juntos – se me acercaba caminando

- ¿Y eso que? – seguía caminando, en un momento llegaría Tony

- ¿Ya olvidaste todo eso? – me detuve

- No lo olvido, lo recuerdo muy bien – voltee a verlo

- Loki... - ahora él se detuvo

- También recuerdo como me dejaste caer al agua y me tomaste por muerto, ni si quiera te tomaste la molestia de buscarme, ¿tan débil me consideras? – ahora era yo quien me acercaba mientras él no se movía

- ¿Por eso atacas la tierra, para vengarte porque no te busque?

- ... - no soy tan infantil como para hacer eso, no todo el mundo es él

- La tierra está bajo mi protección – me apunto con su dedo cochino

- Muy baja protección diría yo, creo que no haces un excelente trabajo dios del trueno – me burle de él

- ...

- ¿Nada que decir? pues yo sí, veo como los humanos se acaban unos con otros y se destruyen sin que tu hagas absolutamente nada, y te haces llamar su ¿protector? – le reproché

- Te crees superior a ellos – ahora estábamos a tres pasos de distancia

- No... bueno si – yo amo a la tierra

- Aun no sabes el verdadero significado de gobernar – alguien había crecido

- Ah, ¿y tu sí?

- No mereces un trono

- ¿Y quién dijo que quiero uno? – pase de el para volver al mismo lugar donde me había tirado

- ¿Entonces que buscas, Loki? – empezó a seguirme de nuevo y me tomo del brazo

- ¿Crees que te lo diré?, ni lo sueñes – me solté de él

Era hoy?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora