Un Roto Para Un Descocido | Papufresco (Papulince X Pana Fresco)

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Esta historia contiene contenido
Delicado, y sensible. Cómo lo puede
Ser el abuso o maltrato. Al igual que
Acciones moralmente cuestionables, aunque
Sea el primer capítulo puede ser algo
Subsetible para algunos lectores.

Capitulo 1: Flor invernal.

Hacia frío, tal vez más del que nunca sintió en toda su vida, su respiración era cortante, y su cuerpo ahora estaba lleno de violentas manchas violetas y lilas que recorrían todo su torso desnudo. Hacia frío.

La ajena lluvia lo empapaba, haciéndolo sentir distante a toda esa situación. Su mirada estaba igual de perdida que la calidez de hace unos momentos, antes de que empezará aquella cruel tormenta. Estaba tirado en el piso, observando desde ahí el paseo de las grises nubes que sobrevolaban encima suyo, parecían burlarse de él-pues ellas si eran intocables- .

De sus labios brotaba sangre, mezclándose y desasiendose con el agua, sus lentes ya hacían rotos a un par de metros de él. Su cara moreteada delataba la agresión de hace un momento. Y sus lágrimas-imparables como la misma lluvía-solo se volvían un reflector hacia ese hecho.

De sus piernas escurría algo de sangre, saliendo de un sitio íntimo, que el, débilmente, intentaba ocultar, jalando su pantalón a medio bajar hacia arriba. Estaba tirando en el piso, derrotado. Tenía un sentimiento amargo, ácido, nefasto, asqueroso, que escalaba de su corazón hasta pasar por su garganta, acabando en arcadas.

Tenía frío.

Analizaba la situación de manera no convencida, no realista, no convencido de lo que acaba de pasar. Intentado hacerse a entender a él mismo que era un sueño más. Un sueño más de ese tipo, que le solía atormentar ocacionalmente. Era una pesadilla. Porque esto no podía ser verdad, esto realmente debe ser una pesadilla. Una inhumana jugada de su sueños.

Pero sin embargo la sensación era clara, la sensación era vivida y real. Esto era, en efecto, una pesadilla. Pero una en vida.

Estaba sin fuerzas, totalmente a la merced de la tempestad. Totalmente vulnerable, tal como hace unos momentos, tal como hace unos años.

Se sentía asqueado, destrozado, temeroso e inseguro. No sabía que hacer a partir de aquel momento, porque ¿Que se supone que haría ahora que sabe lo débil que sigue siendo? ¿Seguir con su vida normalmente, como hace unas horas?.

Su vida se volvió una basura nuevamente, este era un recordatorio del mismísimo cielo, tal vez. Recordándole que él no parece la paz, y mucho menos la felicidad. Recordándole que no es nadie.

Tal vez estuvo así por unos minutos, tal vez algunas horas. Pero eventualmente se marchó de aquel sitio, con su mochila destrozada y su ropa rasgada. Con moretones y heridas-y una herida vieja que, nuevamente, goteaba sangre fresca-, su mirada estaba perdida, estaba atrapada en el pasado, en los recuerdos que ahora vividamente recordaba una vez más. Y una vez más volvía a sentir aquella presión en su pecho.

Su cuerpo se sentía sucio, incluso si había pasado, probablemente, horas bajo la lluvia. Sentía que estaba lleno de tierra, o lodo, o tal vez algo más repugnante como excremento. Sentía que las cosas perdía la importancia, al igual que su vida en si, sentía como lentamente caí a un vacío, o bien, aquel vacío-donde siempre estuvo-solo se lo tragaba más.

Su cuerpo estaba usado, manchado, sucio, su cuerpo y su vida estaba arruinada, y ahora se lo volvía a recordar, volviendo a pasar el mismo hecho. Su vista enfrente del espejo ahora solo reflejaba a una triste "perra" que no pudo hacer nada contra esa humillación.