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Capitulo 4: Miradas ciegas.

El texto no era todo lo que se necesitaba para sacar de contexto la imagen, y es que nadie sabía que había ocurrido en ese momento como para saber si aquella insinuación eran falsas o verdaderas, aún así la posición, o más bien, la manera en la que se encontraba era algo comprometedora.

Y es que aquella foto expuesta en aquella app, era colgada con difamación a su par, y fue tomada en un momento privado dónde uno de ellos se encontraba vulnerable e indefenso. Dónde era una total falta de respeto hacer algo así.

Miguel aferrado a el, en ese momento donde el llanto lo abrumaba por todo lo sucedido, quebrado en su totalidad y en desesperó por todo eso que deseará que acabará. La posición en si no insinuaba nada del índole sexual, pero era fácil de hacerse ver así, pues las actitudes encontrar del contacto físico de Miguel, y que se encontrara, él, abrazándolo. Se hacía ver por si solo como si estuvieran haciendo algo más.

Ya había rumores así, esparcidos como pestes como muchos más, por cierta chica de cabello castaño claro que amaba meter sus narices en temas de parejas inventadas, especialmente y únicamente, homosexuales. Por lo que no era raro de creer un post así, si ya se había escuchado algo así anteriormente.

Sintió impotencia al leer nuevamente el texto, pues en ese momento, donde se tomó la foto, era un tema sensible que pudiera dañar a Miguel. Con esa idea que lo hacía sentir inútil el qué eso se dijera de el.

Miguel no era una "puta".

El era su amigo, su único amigo. Su compañero, y no en temas escolares. Miguel podía ser tachado de todo; de violentó, de impulsivo, de maníaco, de sádico sin corazón.

Pero llamarlo de esa manera, sin saber nada de él, solo para decir un insulto o lograr una estupidez, era algo que no permitiría. Nadie sabía nada de él, todos lo miraban pero nadie podía distinguir lejos de una mancha borrosa complicada-pero no imposible-de leer. De lo que sea que el mundo viera, de lo que sea el mundo creyera ver.

Nadie tenía el derecho de llamarlo por algo que jamás fue ni será. De inventar cosas de el, aunque se lo "mereciera", nadie tiene porqué difamarlo en ningún sentido. Porque ese es terreno peligroso más haya de solo insinuaciones "molestas" de parte de Miguel.

Sintió como sus venas se ardían en irá, como lava en vez de sangre que recorría sus venas, con enfado, molestia y impotencia atorada en la garganta y complicada de digerir. Con odio. Odio naciente de su pecho con intenciones de dañar a lo que daña lo suyo.

Enfrenté de el solo había idiotas amigos de la tipa, chicos sin criterio propio-igual que la mayoría de adolescentes ahi-, que solo venían a reírse de la situación, aparentemente. A lograr un tipo de venganza por esta oportunidad que se les presentó.

Miguel tambaleó, y fue demasiado notorio pues se tuvo que sostener del hombro del chico para no ceder. Probablemente en su mente había una tempestad que hacía caos sus pensamientos, porque así estaba siendo.

-Donde está Camila-hablo nuevamente Luis, teniendo está vez una voz mucho más seria de la anterior-, donde mierda está esa tipa.

El odio le podría el razonamiento, estaba en su punto máximo de tolerancia, y todo estaba por irse al caño si no encontraba a la tipa para que borrará aquel post.

Camila fue una de las chicas que se le acercó al recién ingresar, le pareció amable pero muy molesta, egocéntrica y algo insegura al punto de sonar despertada por aceptación, y no quedar sola. Tal vez por eso le daba tanta incomodidad aquella chica. La pick-me siempre era un dolor de cabeza si eras un chico, y un tumor en el cráneo si eras una chica.

Un Roto Para Un Descocido | Papufresco (Papulince X Pana Fresco)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora