Parte II: Adiós amor

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El teléfono fijo de su departamento había chillado más veces de las que pudo llegar a contar antes de que se decidiera a caminar en su dirección y lo tomara para desconectarlo. Esa tarde no necesitaba de nada ni de nadie solo quería estar sola en casa, en silencio para poder controlar el remolino de emociones que empezó a crecer en su interior luego de que la noticia de que Pandora volvería para hacer dos auditorios fue confirmada por su hermana unas semanas antes.

Miró el número de su hermana reflejado en la pantalla naranja del artefacto antes de suspirar rendida a no dejar pasar esa llamada, no cuando según lo indicado, esa era la llamada número catorce que la castaña le hacía y no malentiendan su accionar solo que esa tarde no estaba siendo fácil para ella.
Para ella que la estabilidad emocional no era uno de los rasgos más fuertes en su psiquis, para ella que decidía estar soltera porque no lograba amar de la misma manera en la que la habían amado y que había amado a personas que no la habían amado como ella lo había hecho. A ella que los fantasmas de las heridas sin cerrar aún le rondaban en la vida.

Descolgó el auricular para ponerlo en su oído al tiempo que un escalofrío de muerte le recorria la espalda y el cielo rezongó con la misma fuerza de lo que podría ser el fin del mundo. Suspiró intentando calmar a su corazón que latía tan rápido que parecía querer escaparse de su pecho y esperó lo peor porque Isabel no solía llamar con tanta insistencia, la castaña entendía a la primera negativa que no tenía ganas de hablar, todo lo contrario con eso día.

-Isa: ¡Chi! Por fin! Dios, es terrible! Dónde diablos estabas que no atendias!?-regaño caminando de un lado para el otro-

Esas pocas palabras fueron suficientes para que Mayte temblara, sus manos comenzaron a sudar y el frío se apoderó de su cuerpo como avisando del pánico, de la ansiedad o de la desgracia y no, no se animó a preguntar, no se animó a hablar solo quería escuchar que todo estaba bien, que nada grave había pasado pero entonces Isabel lo dijo.

Fernanda estaba en el hospital, Fer había tenido una hemorragia interna, Fernanda necesitaba una operación con urgencia. Hasta ese punto había podido escuchar, entender y asentir a cada minima información que Isa le daba en medio del llanto hasta que la frase final llegó: "La negrita se está yendo, no queda mucho por hacer" ese había sido el golpe final para que su mente entrará en trance, para que todo lo que conocía como su mundo se terminase de romper...

~~~

Los vidrios de la ventana detrás de Ada vibraron con el último trueno que sonaría antes de que el ser pelirrojo que reclamaba impaciente se decidiera a hacerse presente y la peli blanca entendió el mensaje cuando vio la luz rojiza alzarse en el cielo. Miró a Mayte que no sabía si estaba soñando, si estaba sumergida en una jodida pesadilla o si realmente tenía frente a sus ojos a Dios.

-Ada: ya, no me respondas ahora, esperaba otra cosa de ti pero no me sorprendes, siempre supe que esto pasaría contigo-aseguro con la derrota presente en su voz, ya la ironía había desaparecido al no obtener la respuesta esperada en el tiempo esperado-en unas horas vendré por mí respuesta, ahora ve, ella te está esperando

La rubia iba a cuestionar ante esas palabras que habían calado ondo en su interior, ella también esperaba más de sí misma aseguro su conciencia y entonces la voz de su hermana la distrajo de su concentracion que estaba puesta en la peli blanca frente a ella. Volteó en busca de Isabel que la miraba desde el borde superior de las escaleras y sintió más miedo que antes al verle los ojos rojos de llanto y las manos temblando como si fueran una hoja.

Isabel bajo corriendo las escaleras hasta tomarla entre sus brazos y romper en llanto abrazada a ella.
May la abrazó igual de fuerte dejando toda la armadura de "Mayte Lascurain, la mujer que no llora frente a nadie" en la nada misma porque sentía que a cada minuto que se tardaba era un minuto menos que tenía la morocha de vida.

No me arranques de ti-MayferDonde viven las historias. Descúbrelo ahora