Íbamos a tocar en el festival de Viña del Mar, todos estábamos felices, nerviosos y sobre todo ansiosos, ya que sería la tercera vez que participábamos en ese gran festival Internacional. Después de un rato subimos al escenario, la gente estaba muy emocionada, cada quien se puso en posición con su respectivo instrumento y empezamos con todo, Miño, miéntele, luego con Una nube cuelga sobre mí, una de las mejores y favoritas del público y nuestros fans. Ya íbamos por un poco más de la mitad de la canción, cuando Álvaro se acerca al Mauri y se dan un piquito, los celos aparecieron, López y yo somos pareja, por eso estaba celoso y sentía como me hervía la sangre. Estaba molesto y un poco triste, pero no podía ni llorar en medio de la presentación ni hacer un "espectáculo", así que mordí mi labio inferior y me aguanté.
*
Nos entregaron la primera gaviota, estaba súper feliz, pero justamente miré el momento exacto en el que Mauri lo abrazó por la cintura y lo alzó un poco, joder, los celos de nuevo, lo intenté ignorar, pero igual me molestaba, aunque sabía que lo hacían solo de juego, pero el Mauricio es mi hermano y Álvaro mi pareja...Terminamos llueve sobre la ciudad, nos despedimos del público y bajamos del escenario, el concierto estuvo la raja. Íbamos caminando por el pasillo para ir al camarín a buscar nuestras pertenencias, no hablé con ninguno de ellos, me sentía mal, solo quería llegar a la casa, entrar en mi habitación, acostarme en mi cama y quizás llorar un rato, pero hablar con Álvaro no estaba en mis planes.
Después de un rato de trayectoria en vehículo, que para mí fue eterno, al fin estábamos por llegar, los chiquillos se fueron hablando todo el camino sobre la presentación, yo me mantuve en silencio y con un semblante completamente serio, estuve pensando todo el viaje, ellos intentaban hablarme, yo respondía, pero cortante, se notaba que no era el mismo de siempre. Al fin llegamos a la casa que arrendamos en Viña del Mar, fuí el primero en bajarse, tomé mis cosas y salí corriendo del vehículo hacia mi habitación, todos se miraron extrañados, nadie sabía que me pasaba.
-Voy a hablar con él- Dijo Álvaro. -Quizás se siente mal- Todos entraron a la casa, se quedaron en la sala de estar, iban a celebrar con una botella de champagne, para hacer un brindis. López fue directo a mi habitación. Tocó la puerta un par de veces.
-¿Quién es?- Pregunté seco y algo grosero.
-Amor, soy yo- Abrió la puerta, al verme sentado en el suelo se acercó a mí y se sentó a mi lado, trató de enredar sus dedos con los míos, pero la aparté rápidamente. -¿Pasa algo?- Preguntó preocupado, mirándome confundido.
-No, solo me duele la cabeza- Respondí lo primero que se me vino a la mente. -Además estoy un poco cansado, si quieres ve a celebrar con los chiquillos, no quiero hablar ahora- Me levanté del suelo y él hizo lo mismo, me tomó la mano suavemente.
-Francis, te conozco, es obvio que no estás así solo por eso, lo siento pero vamos a hablar- Se acercó e intento abrazarme, me separé levemente, López me miró extrañado. -Ni siquiera un abrazo me quieres dar, es obvio que estás enojado por algo que hice- Tomó mis mejillas y me miró a los ojos, miré hacia otro lado, quería evitar el contacto visual.
-No estoy enojado...- Dije cabizbajo. -No sé cómo explicarlo...- Álvaro me miró.
-¿Está así por el piquito que le di al Mauri?- Dijo tranquilo, yo asentí. -Sabes que es solo de juego amor- Dijo con la misma tranquilidad de antes.
-Lo sé, pero igual me molesta- Me sentía avergonzado, sabía que era un juego pero los celos me jugaron en contra. -Entiende que también fue mi hermano a quien le diste el piquito- Dije con lágrimas cayendo por mis mejillas, con su dedo pulgar las retiró con delicadeza, besó mi mejilla para tranquilizarme.
-Sabes que te amo solo a ti- Dijo abrazándome, correspondí. Después de algunos minutos ya estaba más tranquilo. -Amor, te prometo que solo fue de juego- Continuó al ver que ya estaba mejor-Pero si te molesta no lo haré más, lo siento...- Dijo disculpándose, me agarró de la cintura, pegó nuestros cuerpos, puse ambas manos en su cuello, acercamos nuestros labios hasta unirlos en un delicioso beso
Al principio fue un beso cariñoso, pero luego comenzó a subir de tono y empezó a ser más apasionado. Bueno, también debo admitir que Álvaro me provocó en el camarín minutos antes de salir al escenario, me tuve que aguantar todo el concierto, y más encima los celos, ya no iba a poder contenerme más...
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Breves Historias. Los Bunkers
RomansaEsta historia es con el fin de entretener y ojalá no ofender a nadie. Son solo fanfics.