Room 779

𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐 𝟒

"Abrᥲzᥲdo ᥲ tᥙ ᥲᥣmohᥲdᥲ"

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Yoongi se acercó hasta su cama para pararse frente a él. El pelinegro ya iba vestido con su uniforme del equipo, al parecer usarían el guinda y ese color hacia que su piel luciera preciosa, sin mencionar lo jodidamente sexys que lucían sus brazos completamente descubiertos y como si eso fuera suficiente, llevaba su cabello recogido en una media coleta.

Tuvo que tragar duro cuando el chico se paró justo frente a él.

-¿Qué haces aquí?, el partido comenzara en quince minutos, ya había enviado tu camiseta con Taehyung.-

-No vine por la camiseta.- dijo con voz apresurada, quizás ansiosa. -Yo... vine porque...- hizo una pausa para tratar de decir las palabras adecuadas. -Ven al partido Jimin, por favor.- suplico.

Lo que desconcertó a Jimin porque además de reírse y de mostrarse frío e inexpresivo todo el tiempo, era la primera vez que notaba un tono de voz distinto en él y también veía que sus expresiones cambiaban, sus ojos cayeron un poco y su cuerpo se veía tenso y ansioso.

-Pero es que yo no...

-Se que no te gusta el básquet, lo sé...he entrenado mucho lo sabes y es el último partido antes de las nacionales.

-Pensé que no era tan importante.-

-No lo es, pero aún así... escucha, no importa si no entiendes nada de lo que veas ahí... yo quiero... quiero que me veas a mi.- desvío su mirada porque era incapaz de sostenerla con la del castaño.

Jimin se levantó, ignorando la mínima distancia que se había creado entre los dos.

-¿De verdad?.-

Yoongi llevo su mano a su nuca y rasco un poco con nerviosismo.

-Si, bueno, eres mi compañero y literalmente dormimos en la misma habitación, me agradas, eres, eres mi amigo y no lo sé... creo que apreciaré tu presencia.-

Jimin esbozo una pequeña sonrisa, algo en su pecho tintineo feliz, sus mejillas se enrojecieron sin darse cuenta y no podía dejar de sonreír.

-Bien, iré.-

Yoongi volvió a mirarlo con ojos expectantes.

-¿Lo harás?.-

Jimin asintió. -Pero debemos irnos ahora, el entrenador va a matarte si no llegas a tiempo.-

Una enorme sonrisa se plasmó en el rostro de Yoongi y sin cuestionarse nada, sujeto a Jimin de su muñeca y lo arrastró fuera del dormitorio, ambos comenzaron a correr escaleras abajo y corrieron aún más cuando salieron del edificio.

Jimin sentía que sus pulmones se habían quedado sin una sola partícula de oxígeno, se notaba a millas que Yoongi mantenía una excelente condición física, él solía tenerla cuando practicaba danza pero luego de poco más de dos años de no practicar, su condición física se había deteriorado.

Yoongi aún tiraba de su brazo y él simplemente obligaba a sus piernas a no ceder, luego de correr por dos eternidades «según Jimin» por fin llegaron al gimnasio, desde afuera se escuchaban gritos, vítores y música.

Entraron al gimnasio y antes de cruzar la segunda puerta hacia la cancha, Yoongi se paró frente a él, se veía como si absolutamente nada hubiera sucedido, mientras que el castaño obligaba a sus pulmones a tomar todo el oxígeno que podían.

-¿Puedes seguir tu solo?, yo entraré por los vestidores.-

Jimin asintió aun tratando de recuperar el aliento.