Mi hija 3, la última cruzada.

Cap.20

Horas después》》

Camila había disfrutado de una intensa sesión de sexo con su esposa, se sentía feliz de poder tener un poco de tiempo libre para ellas.

La ojiverde disfrutaba de un cálido baño, después de recibir sexo intenso su cuerpo necesitaba descansó.

Narra Camila.

Lauren era insasiable, después de ovarias rondas aún quería más. Mis dedos estaban entumecidos, necesitaba un descansó para continuar.

La había mandado a ducharse con agua tibia, su cuerpo necesitaba un poco de descansó también.

Escuche el sonido de la puerta.

—Camz ¿a donde vas?—

—Alguien toca la puerta, iré a ver—

—No tardes, quiero que te metas aquí conmigo—

—No Tardo bebé—

Camine a la puerta y ahí estaba Yelena. Me preguntaba que quería.

—Hola, no quisiera interrumpir solo quiero ofrecerles nuestros deliciosos platillos—

Esta mujer no me generaba ni una pizca de confianza. —agradezco tu amabilidad pero no deseamos nada por el momento— Parecía tener un interés muy grande en que mi Lauren participará en esa misión suicida. —Algo me dice que no solo has venido para ofrecernos esos platillos, quieres con desesperación que Lauren participe en tu tonta casería de brujas—

—Por lo veo ya te comento la propuesta, solo quería saber si ya lo había pensado—

—La respuesta es negativa ella no va a participar en eso, puede ser peligroso ademas—

—Necesitamos de su equipo, son lo mejor de lo mejor y ella a sido la más interesada por varios años en capturar a esa criminal, así que por eso insisto—

—No me interesa en lo más mínimo, Lauren no va a participar en nada— argumente con firmeza, no dejaría que mi esposa se pusiera en riesgo por nada.

—Camila se que tu eres una agente, la nueva alpha y eh visto videos de ti en acción. Eres increíble peleando y más aún cuando haces equipo con tu esposa, podría ser una gran oportunidad para ambas—

Trate de calmarme, sinceramente esta mujer no entendía un no por respuesta.

—Yelena si valoras tu vida deja de insistir, ninguna de las dos va a participar así que deja de repetir lo mismo—

—Dejare que lo pienses, si realmente tu opinión sigue siendo la misma dejaré de insistir—

Suspire con pezades, esta tipa estaba demente. No entendía un no por respuesta.

–Nos iremos ahora mismo, no nos interesa colaborar con nadie. Es mi última palabra— cerré la puerta y volví con Lauren.

—Era Yelena verdad—

Me percate de que Lauren ya estaba vestida.

—No deja de insistir y para ser sincera ya me tiene cansada, será mejor irnos— dije algo molesta a decir verdad.

—Te llevare a un lugar más ya que este no resultó como yo quería—

Asentí, sinceramente quería estar más tiempo con Lauren. Es decir a solas.

Simplemente me coloque mis zapatos y salimos de la habitación. En la recepción estaba Yelena vestida de una forma muy inusual.

—Gracias por tu servicio, dijiste que no teníamos nada que pagar así que nos vamos—