¿Qué tal si...?

Capítulo (13)

Hoy tenía mucho más valor para revelarme contra Mason. Incluso había decidido no llevar más aquella ropa ridícula que él enviaba a mi casa.

- ¿Estás lista?- me pregunto Beck.

Lo mire tratando de olvidar que ayer había tratado de besarme. Quería olvidar que aquello había pasado. Tener el peso de verme obligada a contarle en algún punto a Jade pesé a estar molesta me frusttaba.
Para mi suerte el parecía estar dispuesto a hacer lo mismo. Pretender.

- Si, hoy no tendré que golpear un cartero- le recordé feliz.

Mason no tardo en entrar al instituto como perro por su casa, con su equipo de camarógrafos listos para grabarme ser una hica rebelde y sin temor a las consecuencias.

- ¿Tori?- preguntó al ver que no traía puesto el horrible traje de medusa- ¿Le enviaste lo que te pedí?- preguntó furioso a su asistente.

- Si, yo lo hice lo juro- aseguró mirandome molesta al verse en problemas por mis acciones.

- No planeo vestir ese espantoso traje de medusa, ¿sabes lo estúpida que me veo?- me queje harta- Tampoco planeo seguir fingiendo ser quien no soy- trataba de no ser grosera pero mi tono revelaba lo cansada que estaba de todo esto.

- ¿Qué? ¿Acaso olvidas que tienes un contrato conmigo?- me amenaza- Eres remplazable, si no estas dispuesta a colaborar conmigo, dímelo, en seguida buscaré a alguien más- su mirada me daba a entender que aquello era real.

Lo creía completamente capaz de quitarmelo todo. Lo que me hacía mirar a Beck en busca de apoyo.

- No encontrará a alguien como ella, no queda más que un día- me defendió tratando de calmar las aguas. Pero ni siquiera el se veía seguro de que todo estuviera saliendo bien.

- Muy bien Tori, si así lo quieres, quedas fuera- me dio una sonrisa simple y calmada- Ya no cantaras en los Platinum Music Awards, ¿queda claro?- su pregunta me enoja, no podía estar hablando en serio.

- Pero, no puede sacarme de un día para otro ¿quién cantará entonces?- me sentía al borde del llanto.

La desesperación de darme cuenta de que Beck no tenía razón me invadía. Estaba por ahogarme al verlo ganar, porque había pasado días vistiendo de forma espantosa sólo para complacer a un público que al final, me fue arrebatado.

Él busco entre las personas que nos miraban. Lo que me hizo sentirme peor por tal humillación.
Miró a Jade que se acercó para ver que estaba sucediendo pero, Mason la vio pareciendo reconocerla. Con esa sonrisa tan falsa y asquerosa que me arrebataba los sueños.

- Tú- le habla y la pelinegra mira a los lados confundida, dandose cuenta de que hablaba con ella.

- ¿Yo?- pregunta mirandome y luego a él sin comprender.

- Tuviste una fantástica audición- la halaga y la veo sonreír. Podía imaginar lo que estaba por decirle y se me hizo un hueco en el corazón.

- Gracias- podía notar en su mirada cierta sorpresa al oírlo decie aquello.

- ¿Qué te parece si tu cantas el número inicial mañana en los Platinum Music Awards?- le propone haciendo que de nuevo cruzará miradas conmigo.

¿Quién más podía remplazarme? La respuesta estaba frente a mis ojos.
El talento de Jade era soprendente pero desee que no aceptará, que entendiera lo importante que era para mí.

- Ella no lo hará- Beck no tardó intervenir.

Pero el como ambos se miraban mostraba cuán mala idea fueron sus palabras. Y aunque yo buscaba que ella comprendiera, la actitud de su novio la hizo tomar fuerzas suficientes para hablar en vez de dudar.