𝗫𝘁𝗿𝗮.

471 49 9
                                    


— Ahora es mi turno, Sannie~.

Sana no pudo pensar mucho cuando Tzuyu atacó su cuello en besos húmedos, lamiendo por ratos la extensión provocando una dura erección en los pantalones de la mayor.

La menor se sentía completamente provocadora al estar consciente de sus actos, y la mayor se sentía totalmente provocada por Tzuyu.

Solo pudo quedarse estática apretando por algunos segundos la firme y delgada cintura de Tzuyu. Sus dedos ejercían presión cuando sentía la humeda lengua de Tzuyu en su cuello.

Tzuyu dejaba rastros de un poco de saliva por su suave cuello, dejó algunas marcas causadas por chupetones y mordiscos leves que llevaron a Sana al borde de su control.

No se resistió más. La camisa abotonada, que usó para ir a clases, de Tzuyu fue abruptamente abierta. Los botones salieron disparados en muchas direcciones y no podía importarles menos. Compraría otra luego, eso no era importante en esa situación.

Tzuyu no se separó de su cuello y clavícula, siguió besando, chupando o lamiendo las zonas donde creía necesarias para darle mayor placer a Sana.

La mayor sacó con delicadeza, y a la vez rudeza, la prenda superior. Rozó los hombros y brazos voluntariamente para sentir como la piel se eriza a su suave toque.

Sacó la prenda y la dejó caer al lado de ambas. Aún con el rostro de Tzuyu en su cuello fue capaz de admirar su cuerpo todavía tapado mayormente pero más piel expuesta.

Las líneas que iniciaban la zona de sus pechos era visible por el sostén negro, el cual hacía resaltar su piel pálida. Su abdomen estaba expuesto a su mirada, no desaprovechó para volver a verlo y tocarlo con la punta de las yemas de sus dedos haciendo que se contrajera un poco y remarcara sus muy buen trabajados abdominales. La vista era hermosa, si le preguntaban a Sana.

Tzuyu gimió a su toque y tomó sus manos para guiarlas hacía un poco más bajo de su abdomen, casi a su miembro. Nayeon acarició esa zona, cada vez más abajo llegando a rozar su notorio bulto.

Tzuyu solo volvió a su tarea de estimular a Sana en la zona de su cuello y clavículas mientras de vez en cuando tenía que jadear para liberar su emoción cada que la mano iba más abajo.

Cuando las manos subieron se quejó más pero al ver que era para quitar su sostén solo se inclinó para que su Alfa pudiera quitárselo con más facilidad. Sana dejó libre sus considerables pechos, masajeó cada uno un tiempo, la estimulación podía hacer más fácil la penetración a Tzuyu, ya que todos los días la única que fue penetrada fue Sana.

En minutos, la única que tenía prenda era Sana y solo era el bóxer, lo demás de ambas había desaparecido de sus cuerpos.

Tenían una fina capa de sudor.

— Sanashi~, ya hazlo por favor~ —susurró en su oído con desesperación, era un poco extraño que Tzuyu se sometiera fácilmente a Sana pero en ese momento no le tomaron mucha atención a eso y siguieron con lo que ambas deseaban.

Sana se levantó para que Tzuyu pueda apartar los boxers, lo hizo con una delicadeza que logró desesperar a Sana.

Tzuyu lo bajó hasta apartarlos completamente del cuerpo de la mayor y con rapidez se sentó, solo frotándose contra él, sin llegar a introducirlo en ella, solo dejando que se frote contra su propio miembro o contra sus glúteos.

Sana gimió al contacto, se inclinó a la piel expuesta de los senos y pecho para dejar un beso dulce y lamer justo en la marca reciente, haciendo que Tzuyu de un saltito provocando los gemidos que salieron de ambas al sentir de sus miembros.

Sana empujó a Tzuyu hacia atrás, manteniéndose arriba de ella, y para quitar los repentinos nervios de la menor le dio una leve sonrisa y la besó con dulzura contrarrestando el caliente momento que estaban teniendo.

— ¿Estas segura, Chewy-ah? —preguntó al posicionar su miembro alineado en el agujero de la menor.

Sana solo quería hacerla sentir cómoda, que no se obligue a someterse en sumisión hacia ella, si no que lo quiera de verdad.

— Q-Quiero y mucho, Sannie~ —la respuesta la sorprendió un poco por el tono desesperado y suplicante de la contraria, pero rápidamente dejó la sorpresa y se concentró en hacerla sentir bien.

Metió poco a poco, se detuvo cuando escuchó un quejido pero Tzuyu parecía más disfrutarlo que lamentándose.

Besó su cuello mientras lo siguió metiendo hasta que sus muslos chocaron con los de Tzuyu ocasionando un golpeteo leve.

— Muevete, Sanashi —la nombrada solo la besó dulcemente mientras se apartaba hasta quedar solo el glande dentro y luego se unía lentamente.

Gruñó por el rasguño en su espalda pero no hizo nada para detenerlo, trataba de no hacer tanto ruido porque era consciente que había más personas en casa.

La única que parecía no consciente era Tzuyu y tuvo que callarla atrayendola a un beso húmedo, del cual no se quejó.

Bajó la mano que tenía en la nuca de la menor y la bajó lentamente, rozando sus pechos y abdomen hasta la polla orgullosamente erecta, la tomó entre sus dedos y masajeó mientras no paraba su vaivén de sus caderas.

Tzuyu gimió amortiguandolo en el beso y no aguantó más para cuando llegó a su orgasmo sintiendo a Sana viniendose después, el líquido caliente y viscoso que fluía en su interior extrañamente se sentía muy bien.

Se separó jadeando un poco y con arrepentimiento apartó sus manos de la espalda de la menor, no quería herirla y ahora que lo pensaba, había rasguñado mucho.

— ... L-Lo siento —Sana la miró desconcertada por la repentina disculpa— Por los rasguños... ¿Duelen?

No podía mentir, sí, dolian pero eso no quería decírselo para que no se preocupara.

— No, estoy bien —la menor obviamente pudo ver que si dolian y la obligó a acostarse— ¿Qué harás?... ¿A ti no te duele? ¿Estuvo bien?

Tzuyu dejó un tierno beso en su cuello.

— Estuvo bien, Sanashi.

Tzuyu con un poco de dificultad se sentó y se estiró para lograr abrir el cajón de la mesita que estaba al lado de su cama y sacó algo que Sana no pudo captar bien qué era.

Solo cuando esa misma cosa fue posada en su espalda se dio cuenta qué era, era una gasa con alcohol, de las mismas con las que Tzuyu había curado sus heridas hace unas horas.

Se quejó y tensó los musculos de la espalda haciendo que solo ardiera un poco más, relajó los músculos lo más que pudo recibiendo un beso en su cuello, cortesía de Tzuyu.

— ¿Qué estás usando ahora? —preguntó cuando sintió otra consistencia en su espalda.

— Semen.

— ¿Eh?

— ¿Pues que más? —preguntó sarcásticamente divertida la menor— Es crema para que no te duela tanto, Chaeyoung tiende a lastimarse mucho cuando hace deporte y tuve que comprar esto, es lo que estoy usando en ti.

— ... Por un momento sí pensé que era semen.

— Pues si quieres lo uso —Sana nego rápidamente con la cabeza.

— No, gracias

Y ambas rieron... Bueno, hasta que Chaeyoung entró, las vio y después se fue tratando de sacar esa imagen de su cabeza.

Se miraron en silencio hasta que estallaron en carcajadas.












Y ESTA HISTORIA A TERMINADOOOOO😭😭😭😭😭😭
Toco esperar a ver q subo mas adelante😹.
Una vez más quiero agradeceré a yonan418 por permitirme adaptar su historia, de vdd lo agradezco mucho🫶
Nos vemos más adelante los tqm😘

¿𝑨𝒍𝒇𝒂?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora