La vida no le sonreía a Pablo. Al poco tiempo del fallecimiento de su padre, vendió la granja. Las deudas lo estaban comiendo vivo, es por eso de tal decisión.
Le quedaban un par de días ahí. Para su suerte, Pedri lo dejó quedarse en su hogar, solo tendría que pagar su estadía, no podía vivir gratis.
Ya estaba preparando sus maletas, no tenía muchas cosas. Su rostro tenía una expresión triste, pues claro, el lugar le daba melancolía. Desde aquél día, no volvió a entrar a la habitación de su padre, sentía que si siquiera se asomaba, rompería en llanto. La vieja casa le traía muchos momentos a su mente, recordaba con nostalgia.
De pronto, se ve interrumpido por el golpeteo en la puerta. Cuando va a atender, su corazón deja de later, era Lewandowski. Pensó que nunca lo volvería a ver.
-¿Señor Lewandowski? ¿Qué hace por aquí?-
-Joven Gavira. Le vengo a proponer una cosa.- A Pablo se le sonrojaron las mejillas, presentía que sería algo bueno.- Le daré refugio y alimento en mi morada.- El hombre da una pausa corta- Pero tendrá que prometerme algo.- El chico no entendía que estaba pasando.- Dame una oportunidad de enamorarte...-
Gavi estaba estático, al parecer, Pedri siempre tuvo razón. No podía reaccionar, ¿qué debía hacer? Robert le parecía guapo, y era muy amable con él. Pero jamás imaginó andar con el mayor. Quizá debía hacerle caso por primera vez a su amigo y aprovechar la situación.
-Está bien, acepto...-
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Voy a tratar d q el otro capítulo sea largo 🤧🤧
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El Prado |ˡᵉʷᵃᵛⁱ
القصة القصيرةPablo Páez Gavira, pasaba sus peores momentos en la granja con su padre, pensaba que toda su vida estaba cayendo en picada, hasta que conoce a Robert Lewandowski, un empresario que se compadece de su situación.
