VII

212 17 0
                                    


Pablo sentía culpa. No pudo estar en los últimos suspiros de su padre. Estaba enojado, no con el rubio, sino con él mismo, ¿cómo pudo ser tan ingenuo?
El chico presentaba odio hacia él y aun así confió en su palabra, confió en que las llaves estarían en aquella habitación. Ahora su progenitor estaba muerto, la única persona que lo acompañó en su corta vida ya no estaba. Ya no podría correr hacia sus brazos cuando esté triste, no escucharía las palabras de aliento para poder levantarse de nuevo, no tendría a la persona que lo aconsejaba en cada paso que hacía. Su padre no volvería.





















Inmediatamente renunció a su trabajo. No quería comer, no podía dormir, vivía atormentado. Su amigo no estaba enterado de nada, pero al notar su ausencia en el parque, fue a visitarlo.







-¿Gavi? ¿Te encuentras bien?- Pedri lo había encontrado solo en su habitación, con los ojos rojos e hinchados.

-Pedri, no puedo seguir con esto. Mi padre se fue, él no volverá...- El otro se quedó impactado.

-Pablito, tú eres fuerte. Sé que podrás salir de esto. Tu papá siempre estará contigo, él siempre te acompañará. Yo también estaré siempre a tu lado, nunca lo dudes.- Pedro le da un fuerte abrazo, siente como su hombro se humedece, Pablo estaba llorando.

-Gracias, amigo. Muchas gracias...-







































-¿Quién te crees que eres? ¿Qué tienes en la cabeza para hacerle eso a alguien tan bueno como Pablo? Ni siquiera eres tú el importante de por aquí, sólo te conocen por ser la perra de Lewandowski.- Pedri estaba eufórico, no sabía bien lo que hacía, solo trataría de que aquel chico no se salga con la suya.

-No me levantes el tono de voz. Te recomiendo que no me sigas faltando el respeto. No me cuesta nada ir a llorarle al idiota de Robert para que te exilie de por aquí.- Se le notaba el aire de superioridad que tenía, el rubio no tuvo en cuenta de que su pareja estaba escuchando todo, lo bajaría de su nube.

-Lárgate de aquí. No quiero verte más. Me has estado usando para tu beneficio, además de que has tratado mal a alguien inocente. Eres una lacra.-

-¡Robert! Mi amor, no estás entendiendo. Yo solo- El chico es abruptamente interrumpido.

-¡Qué te largues!- Lewandowski estaba decidido. Buscaría a Gavi.

------------------

Perdón por este capítulo feo y corto, la escuela m está matando.

Voy a actualizar los fines d semana.

Besoss

El Prado |ˡᵉʷᵃᵛⁱDonde viven las historias. Descúbrelo ahora