Naruto 10: ¡Hora de ser héroe!

Capítulo 6. Temporada 1.

Los genin de Konoha se encontraban viendo a Anko, la Jonin les iba a hablar un poco del control de chakra y el cómo beneficiaba a la multitarea en la batalla.

— Ustedes como ninjas deben ser armas especializadas en cumplir varias tareas simultáneamente, si sus mentes son capaces de soportar el estrés de por ejemplo hacer un jutsu en una superficie como una pared o en un líquido como el agua, serán mucho más eficientes en cualquier cosa que hagan. — Explicó para luego demostrar el caminar en un árbol. — Si logran llegar a la copa del árbol, su próxima práctica no será tan dura. — Dijo con una sonrisa sádica, asustando al equipo 7.

Y así, todos comenzaron a intentar escalar el árbol con solo sus pies, excepto Naruto por claras razones, que estaba viendo de brazos cruzados y una mirada aburrida. La primera que logró subir perfectamente el árbol fue Sakura.

— Como ven, Sakura logró subir de manera efectiva debido a que sus reservas de chakra son muy bajas, lo que le permite concentrarse mejor en su estabilidad, si tienen poco chakra su cuerpo fluirá mejor con su espíritu, mientras que alguien como Kiyomi, que tiene unas reservas inmensas se le dificultará al tener una fuerza espiritual desigual a su cuerpo. — La explicación de Anko les hizo el suficiente sentido a los mellizos Namikaze y a Tatsuki, que aunque no tuviese una reserva tan grande, era bastante superior a la de Sakura.

Las que llegaron más alto luego de Sakura fueron Tatsuki y Kiyomi, que habían comenzado a competir a ver quién de las dos llegaba más alto, mientras que a Menma le pareció un juego estúpido y se quedó en una rama a una buena altura.

Anko se fue junto a Sakura y Menma de vuelta a la casa del constructor de puentes, después de todo estaba oscureciendo.

— Oigan ustedes dos, si se quedan jugando se perderán la comida. — Exclamó Anko, siendo ignorada por las dos genin. — Ugh... Cabezas huecas. —

Las dos chicas continuaron marcando hasta qué tan alto llegaban con unos kunai.

— Ya vete, niña zorro. — Tatsuki suspiró, mientras recuperaba aire para seguir intentando llegar a la copa de su árbol.

— ¡Ya quisieras, rarita! — Kiyomi dió otro impulso para llegar más alto, pero solo llego hasta dónde había llegado la Uchiha.

Con miradas desafiantes y de seguridad, ambas ninja soltaron un grito y se lanzaron una última vez ya bastante cansadas, finalmente llegando ambas al mismo tiempo a la copa de sus árboles.

— Je... ¡Jajajaja! — Se rió Kiyomi con un ligero sonrojo. — ¿Viste? Llegué un momento antes que tú, niña de conjuntivitis. — Luego de decir eso, se echó sobre las ramas.

— Ya... Quisieras tomate maduro... Yo llegue primero. — Dijo con una sonrisa y entre suspiros la Uchiha.

Mientras ellas reposaban en las simas de los árboles, Naruto las miraba con una sonrisa mientras se mantenía cruzado de brazos.

— ¡Oigan! — Exclamó para llamar su atención. — ¿Necesitan transporte? — Preguntó para luego presionar la pantalla de selección de su Omnitrix.

— ¡Apestolibelula! — Exclamó Naruto a la vez que comenzó a volar para ir a recoger a las dos ninja.

— ¡Ni se te ocurra tocarme, bicho apestoso! — Gritó Kiyomi. — Hueles peor que la colonia de Menma. — La niña estaba tapando su nariz con su dedos.

La Uchiha aún y con el olor se subió a la espalda del insecto gigante, a regañadientes su hermana dejo que la tomase de su ropa para que las deje en el hogar de Tazuna, donde aterrizaron en el techo para no ser vistos. Luego del aterrizaje Naruto deshizo su transformación y acompaño a sus compañeras de la hoja hasta la puerta principal.