Capítulo 7. Temporada 1.

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Haku al notar que su factor sorpresa había sido descubierto se lamentó, no quería matar tan rápido a esas dos, pero ya no tenía opción. El ninja del Hyoton alzó sus manos con senbon y a la vez que eso ocurría, en sus otros espejos se vio reflejado también, dejando incrédulas a las ninjas de Konoha.

Una vez que los espejismos estaban en todos los espejos, estos comenzaron a saltar y saltar de un espejo a otro, haciendo que Tatsuki pierda de vista al que era reflejado, y mientras hacía esa danza mortífera les eran arrojados varios senbon desde todas partes, dejándolas inmovilizadas a ambas, aunque Tatsuki estaba peor al no poder esquivar como Kiyomi, que tenía sus reflejos mejorados.

Mientras, Kakashi chocó un kunai contra la Kubikiribocho y al mismo tiempo veía a Anko esquivando ataques del clon, así que hizo sellos de manos con una sola mano y gritó:

- ¡[Doton: Doriuheki]! - Luego de exclamar el jutsu, una gran pared de tierra se levantó entre Anko y el clon.

En un rápido movimiento Anko hizo una sustitución con Kakashi, dándole una patada en el abdomen al ninja renegado, mientras que él ninja del cabello plateado dio un salto y haciendo algunos sellos de manos lanzó un potente jutsu de rayo al clon de agua, acabando con él automáticamente.

Zabuza gruñó mientras se agarraba su abdomen.

- Nada mal, ninjas de Konoha, pero ya estoy harto. - Dijo para luego intentar lanzarse contra Anko.

Al ver las intenciones del hombre, Kakashi le dio un fuerte golpe en su rostro, enviándolo lejos.

- Anko, inmobilizalo, voy a liquidarlo aquí mismo. - Kakashi comenzó a hacer con paciencia sellos de mano. - Ushi... U... Saru... - Luego de efectuar sus sellos de mano, el ninja peli plata extendió su mano derecha hacia abajo con su palma bien abierta, mientras que comenzaba a concentrar una gran cantidad de chakra.

Anko se sorprendió al ver el jutsu estrella de Kakashi, pero rápidamente hizo caso a su pedido de inmovilizar a Zabuza.

- Esta vez te vamos a matar maldito... - La Jonin sacó de su chamarra un pergamino, abriendolo y mordiéndose el dedo para sacar sangre, haciendo una larga línea encima de los kanji, haciendo aparecer varias serpientes.

Las serpientes de Anko saltaron a Zabuza, apretando con extrema fuerza sus brazos, piernas y cuello, impidiendo que se mueva.

Kakashi seguía canalizando su jutsu de rayo en su mano, mientras más energía se estaba concentrando en ese punto, el suelo se agrietaba a su alrededor.

- Lo va a hacer... - Pensó aún sin creerlo Anko.

Todos estaban en un punto muy importante del encuentro, mientras que Naruto...

El joven del Omnitrix iba a seguir durmiendo, de no ser porque escuchó los gritos de Tsunami viniendo de la planta de abajo, su reacción instintiva fue preparar su Omnitrix y presionarlo.

En el primer piso de la casa estaba Tsunami siendo sometida por dos asaltantes con grandes espadas.

- ¿Qué dices? Es bonita. - Dijo con malicia el que la estaba sosteniendo, tomando con fuerza su cara. - Vamos a disfrutar antes de llevársela a Gato. - Ante lo dicho por el hombre, Inari saltó a intentar ayudar a su mamá, siendo pateado por el compañero del que sostenía a su madre.

- ¿Oh? El pequeño niño quiere ayudar a su mamá? Que lástima, quedate a ver si quieres. - El otro dijo con un tono cínico y entre risas.

Pero las risas se terminaron cuando se comenzaron a escuchar fuertes pasos viniendo de la parte superior de la casa, los dos criminales desenvainaron sus espadas y apuntaron a las escaleras.

Naruto 10: ¡Hora de ser héroe!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora