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Sanji, el chef con patadas de fuego, se unió a los Sombrero de Paja tras el encuentro en el Baratie, un restaurante flotante donde demostró no solo sus habilidades culinarias, sino también su gran fuerza y empatía. Su sueño de encontrar el All Blue, un mar legendario donde viven todas las especies de peces del mundo, encontró eco en los sueños de Luffy y el resto de la tripulación.

Sanji pronto se convirtió en un pilar fundamental del equipo, complementando las habilidades y los corazones de sus compañeros. La tripulación, con Luffy a la cabeza, se embarcó en el Grand Line que los llevaría a enfrentarse a desafíos y nuevos enemigos.

Nefertari Vivi, la princesa de Alabasta, se convirtió en una aliada crucial para los Sombrero de Paja. Bajo el falso nombre de Miss Wednesday, buscaba desesperadamente ayuda para salvar a su reino del desastre debido a los planes de Crocodile, líder de Baroque Works y uno de los siete Shichibukai. A pesar de los peligros que esto implicaba, Luffy y su tripulación no dudó en ofrecer su ayuda, motivados por su sentido de la justicia y la amistad que rápidamente habían formado con Vivi.

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El cocinero estaba por acabar de lavar los platos y utensilios que había utilizado para la merienda, ya preparándose mentalmente y acomodando un poco su lugar de trabajo para hacer la cena. El sol esparcía su luz y seguía manteniendo el lugar iluminado, cuando escuchó la puerta de la cocina abrirse.

Pudo divisar por el rabillo del ojo algo verde, así que supuso que era el espadachín en busca de una botella de sake. No se molestó en sacarlo a patadas llamándole borracho porque en la bodega no había más de la bebida que buscaba y se percataría él mismo cuando entre en el lugar.

Continuó con lo suyo, pero se sorprendió al sentir la presencia de el moreno justo detrás suyo, había estirado sus dos brazos a cada lado del rubio y apoyado sus manos en la mesada. El rubio le daba la espalda, se recuperó de la anterior sorpresa y estaba preparado para responder con violencia hacia la aparente provocación de Zoro. La sorpresa volvió a reflejarse en sus facciones cuando el espadachín dejó salir un sonido de su boca.

—Ah.. Agh.. —al escuchar eso el cocinero se volteó, quedando frente a frente con Zoro, que aún lo tenía rodeado, con una expresión sombría en su cara, pero un gran sonrojo acompañado de una respiración agitada y una aparente subida de temperatura.

Hizo a un lado sus primeras intenciones de iniciar una pelea para preocuparse por su compañero, parecía estar enfermo, y aunque no se llevaran del todo bien, hubiera hecho lo mismo por cualquier integrante de la tripulación.

Estaba a punto de preguntar, cuando sintió como el otro pegaba sus cuerpos más de lo que estaban. Pudo sentir el calor del otro al instante, estaba hirviendo. Seguía sin comprender del todo la situación, hasta que el moreno lo empujó más a su cuerpo con una mano en su espalda baja y comenzó a olfatear cerca de su cuello.

Fue en ese momento cuando lo entendió todo: Zoro era un alfa. Como cualquier alfa joven y saludable, entraba en celo cada ciertos meses durante un determinado periodo de tiempo. Él no comprendía ni era un gran conocedor del tema, pero sabía bien qué era lo que estaba pasando y que era lo que quería ahora mismo el peliverde.

Posó sus dos manos en cada hombro del contrario, para mantener una cierta distancia y hacer que el espadachín lo mirara a los ojos. Lo que generó una pequeña queja del contrario.

—Zoro..¿Es tu primer celo? —Sanji no estaba seguro de cómo tratar al chico frente a él, había escuchado que durante los ciclos de celo los alfas se ponían extremadamente territoriales y agresivos hacía cualquier persona que no fuera su compañero omega, sobre todo en los primeros celos que siempre son los más intensos.

Vínculos - 𝒵ℴ𝒮𝒶𝓃Donde viven las historias. Descúbrelo ahora