Ambos se quedaron en silencio, observando la lluvia de estrellas.
Estrellas que pasaban dejando un brillante rastro de luz, estrellas que solo venían de pasada para alimentar la ilusión y esperanza de muchas personas.
Luego de algunos minutos, HyunJoong se quedó dormido sobre el regazo de Saeng.
—No creo que resistas mucho tiempo… —musitó Saeng acariciando el cabello de Hyun —Pero eso no significa que no pueda ayudarte.
Posteriormente, regresaron al hospital. Saeng se encargó de administrarle nuevamente el suero y de cobijarlo bien.
Eran exactamente las cuatro de la mañana.
—Nos vemos mañana Hyun Joong —se despidió —verás que pronto encontraré una salvación.
—Espera… —lo detuvo, tomándole la mano —no te vayas.
—Pero me tengo que ir, no puedo quedarme aquí.
—Por favor, duerme conmigo aquí esta noche.
—No puedo Hyun, si Oh Hyuk me ve amaneciendo aquí me va a matar. Mejor nos vemos mañana.
—Por favor. El tiempo se agota y no quiero morir sin dormir una noche contigo.
Saeng pensó un momento… luego decidió dormir con él.
Con mucho cuidado se subió a la cama con él, justo a su lado. Se recostó sobre su pecho y se tomaron de las manos entrelazando sus dedos.
Así pasaron la noche. Ambos dormían profundamente y placenteramente en compañía del otro.
Algo despertó a Young Saeng. Movimientos agitados que parecían venir de Hyun Joong.
Abrió lentamente los ojos y Hyun Joong parecía estar teniendo un ataque ahora mismo. Se levantó de inmediato y gritó cómo pudo.
Aunque él era doctor, la impresión y desesperación al mirar a su amado de esa manera le hizo perder la conciencia de sus conocimientos.
Rápidamente las enfermeras comenzaron a entrar.
—¿Qué hace aquí doctor Heo? —preguntó una de ellas.
—Young Saeng… —musitó Min Hee entrando a la habitación.
Esta noche Oh Hyuk también estaría en el hospital, por lo que tuvo que correr también a la habitación de Hyun Joong.
—¿Qué haces aquí? —preguntó Oh Hyuk, observando a Saeng en la escena.
Saeng no podía ni siquiera hablar. Su único deseo era que estabilizaran a Hyun Joong.
—Traigan el desfibrilador, ¡Ya! —gritó Oh Hyuk.
Los ojos de Young Saeng estaban comenzando a ser empapados por las lágrimas. Lo único que podía ver a través de aquellas gotas, era a Hyun Joong siendo reanimado por Oh Hyuk.
—¡Lo estamos perdiendo! —gritó Min Hee.
—No, demos otro más —replicó Oh Hyuk —Hyun Joong, Kim Hyun Joong abre los ojos y no te duermas.
Saeng se acercó a ellos. Tomó la mano de Hyun Joong y la apretó con todas sus fuerzas.
—¡Hagámoslo Min Hee! —gritó Saeng —Por favor. Ya firmé todo, denle mi corazón.
Oh Hyun y Min Hee se miraron mutuamente. Definitivamente Saeng estaba loco.
—¿Qué? —preguntó Oh Hyuk —¿Qué estás diciendo Young Saeng?
—¡Por favor! —gritó llorando —Yo, yo soy el donante. Yo quiero ayudar a Hyun Joong.
—¿Estás loco?, No cumples con las condiciones. Esto es un error, Young Saeng.
—No lo es. Yo soy el donante Oh Hyuk, yo lo soy.
Oh Hyuk observó a Min Hee, quién simplemente agachó la mirada.
—¿De qué está hablando Young Saeng?, Respóndeme Min Hee.
—Y-yo…
—¡No perdamos más tiempo! —gritó Saeng y se quitó la bata, además de su reloj.
—¿Qué haces Young Saeng?
—Yo ya dí mi consentimiento. Vayamos al quirófano ahora.
—¡Young Saeng! —exclamó Min Hee.
—Lo siento Min Hee. Pero yo quiero, yo debo salvar a Hyun Joong.
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La luz que estaba delante de sus ojos era inmensamente brillante. Estando a lado de Hyun Joong, tomó su mano y lo observó por un momento.
Antes de que la inyección hiciera efecto y cerrara los ojos para continuar con la operación, quiso ver a Hyun Joong por última vez.
—Nos veremos luego —musitó con lágrimas corriendo por sus rosadas mejillas —Te prometo que te buscaré. Ahora podrás vivir…. Te amo Hyun Joong.
—¿Estas listo Young Saeng? —preguntó Oh Hyuk.
—No. Aunque siento cosquillas por todo el cuerpo y comienzo a perder la movilidad, no quiero irme aún. Quiero mirar a Hyun Joong unos minutos más.
—Saeng, aún podemos detener esto.
—No, no quiero. Sigamos —miró a Min Hee —¿Guardaste bien la carta?, Quiero que se la des en cuanto despierte por favor… Min Hee.
Min Hee asintió triste.
—Nos vemos Hyun Joong, no rechaces mi corazón ¿De acuerdo?
Sus manos perdían fuerza y sus ojos estaban cansados. El momento había llegado.
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Hyun Joong abrió los ojos. Nuevamente en el hospital, rodeado de máquinas y cables.
Además, de que esta vez un dolor en el pecho no desaparecía.
—¿Estoy abriendo los ojos? —se preguntó en voz baja y débil.
Lo último que recordaba era haberse sentido mareado y desconcertado mientras sufría uno de sus tantos ataques.
—¿Y Young Saeng? —se volvió a preguntar.
El sol ya había salido y parecía que algo le había ocurrido.
Una enfermera entró con una bandeja y comida, pero al observar que Hyun estaba despierto le gritó de inmediato a otra mujer.
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AnniaCriz
LiaMerYMK
JazminBecerraZavala
YennyCaires
RosaIreo
NenaSaeng
giselle_kyujong
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𝙏𝙀𝘼𝙍𝙎 𝙁𝘼𝙇𝙇𝙄𝙉𝙂 - 𝙃𝙔𝙐𝙉𝙎𝘼𝙀𝙉𝙂
Storie breviHyun Joong está internado en un hospital en espera de un donante para su corazón enfermo, pasando sus últimos días de vida sin esperanza alguna. En una ocasión se encuentra con uno de los cirujanos del hospital (YoungSaeng), quién posteriormente le...