(7)Prejuicios

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Shen Jiu se dio cuenta de aquella mirada, viendo en aquella dirección se encontró con los ojos de un contento pero avergonzado Liu.

Por alguna razón, Shen Jiu le devolvió la sonrisa, a modo de burla, pero esto el Liu no lo sabía.

—Y bien ¿Pero ya terminaron? Necesito ir a entrenar a mis discípulas.

El líder Yue Qingyuan solo suspiró y asintió, pero al parecer reaccionó.

—Antes de eso, QingQi, también era para recordarle que mi shidi QingQiu quiere de tu sabiduría para darle una pequeña lección a su discípula más reciente.

La mayor pareció reaccionar al ser mencionada un pequeña.

—Claro, como el bastado de Qingqiu es tan inútil como para educar a una joven como ella, me veo obligada a intervenir.

Esta respuesta molestó a ambos Shen, quienes callaron. No por mucho.

Shen Jiu no aguantó esa falta de respeto a su alumna.
—Acaso esta shimei insinúa qué una mujer es incapaz de defenderse aun siendo rodeada de sus shixiong? ¿Aun cuando tiene la mejor educación usted piensa que es maleducada?
Le recuerdo que mi pico es sobre las artes, manejamos sobretodo la educación e inteligencia, cosa que por lo que veo a usted le hace falta.

Todos callaron, un Liu riendo, intentando taparlo con una tos, mientras que la mencionada hervía en su enojo, mientras trataba toda palabra con veneno se levantó de su asiento.

—Ya Verás Shen Qingqiu, no te dejaré salirte con la tuya.

Y se retiró de aquella habitación.

Antes de que todo se quedara en un completo silencio, el líder Qingyuan habló.

—Mis shixiong, esta reunión terminó, pueden retirarse y lamento las molestias.

Todos, con un asentimiento, se retiraron.

...

Estando en Qing Jing, ambos shen llegaron a la casa de bambú, recostandose en aquella cómoda cama.

—Sabes Jiu-Ge, esta reunión fue terrible.

—Mn.

Ambos solo suspiraron, era muy temprano por lo que las clases apenas comienzan.

—Mocoso, iré a dar clases, tu habitación es la lateral, prepara lo que quieras y si necesitas algo hazle saber a Ming Fan, me retiro.

Y sin más retiró, quedando solo en aquella habitación, mientras pensaba que llevaría a su habitación.

Sus únicas túnicas y los regalos de su hermano.

Ese mismo día que compraron telas, Shen Jiu le había comprado un abanico, ya que había notado que le llamaron la atención.

Lo que Shen jiu no sabía es que, lo que en realidad llamaba su atención era nada más que él y su elegancia y belleza al mover de tal manera aquellos abanicos, era una obra de arte en persona.

Y sin más se fue a su nueva habitación.

...

Amaba y odiaba dar clases, sabía que todos tenían diferentes métodos de aprendizaje, el mismo se había adaptado a algunos para aprender de mejor manera, y ahora se dedicaba a enseñar sus aprendizajes.

El problema era su más reciente discípula, Ning YingYing, la joven era muy alegre, sin intención de insultar, muy poco inteligente, algún día se irá con un mal hombre si seguía así.

Por lo que le dará clases extras, una clase para defenderse antes que  a todos los demás no estaría mal, la chica tiene 11 años, no pasa nada.

Y así lo hizo, al terminar la clase se dirigió con la chica, fue más al verla triste, ella no era así.

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