VIII

123 15 17
                                    

[Decisión]

[Decisión]

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

–Pero ya fuiste a Canadá hace cinco meses.

–Sí, pero necesitan que regrese porque todavía no hay hechiceros suficientes.

–Ese es su problema, además, ¿por qué te llaman específicamente a ti?

–Supongo que es porque ya me conocen. –Aún no estaba de acuerdo con que se fuera. –No te preocupes amor, solo será una semana.

–Es mucho tiempo.

–Agh, ya sé. –Dejó de lado la maleta que estaba preparando y se acercó a mi para recargar su cabeza en mi hombro. –Yo tampoco quiero dejarte, no sé cómo sobreviré una semana sin ti. Al menos no será un mes como la última vez.

–Bueno, tienes razón. –Quitó su cabeza de mi hombro para mirarme y con sus manos tomó mis mejillas.

–¿Cómo te has sentido últimamente? ¿Tus mareos han bajado? ¿Te sientes mejor?

–Si... Un poco.

La verdad era que no, al contrario, había empeorado. Hace unas semanas comenzaron a darme mareos muy fuertes, en un principio supuse que era por la escuela y las misiones cada vez más peligrosas a las que nos mandaban, creí que solo sería pasajero, pero hace una semana me empezaron a dar unas grandes náuseas después de haber ingerido algún alimento o a veces ni siquiera por eso y solo porque sí.

–Estaré bien, te lo prometo. No quiero que estés pensando en mi durante alguna pelea.

–Siempre pienso en ti.

Nuestras caras se fueron acercando poco a poco y cuando estuvimos a pocos milímetros de que nuestros labios se unieran...

–¡Yuji! ¡Se te hace tard- ah. –El profesor Gojo abrió la puerta de golpe sin previo aviso. –Oh no, no, no, no, no, ustedes sigan con lo suyo, yo los espero aquí. –Tomó una silla de algún lugar y se sentó expectante a que siguiéramos con lo nuestro.

–Ni loco. –Hablé con agresividad y me alejé a una distancia considerable de Itadori.

–Ahhh pero yo quería ver. –Hizo un puchero. –Bueno, si ya no hay nada más que hacer, vámonos Yuji. Te acompañaré al aeropuerto. Bye, bye Megumiii.

–Sí, sí, ya vete.

–Que malo eres Megumi. –Salió de la habitación dramatizando un lloriqueo.

Moral of the Story | [Itafushi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora