Los cambios son necesarios

"Tenemos que hablar"

30 de Enero 2024.

Hace pocos días que Ross y Martha volvieron a México, era hora de que hablara con Mayo sobre nuestros sentimientos espero que todo salga bien.

-¿Se puede?- Hablo mientras entraba a la habitación del de lentes.

-Claro, aún que no se porque preguntas si ya entraste- Respondio con una pequeña sonrisa.

-Si, lo siento-

-No te preocupes, ¿Que paso?-

-Bueno hace tiempo que he querido hablar contigo sobre...-

-¿Sobre que?-

-Es que es difícil de decir... pero es que hace unos años yo... ahh es muy difícil- Dijo mientras ponías sus manos en su rostro y se tiraba a la cama de su amigo.

-Oye tranquilo puedes decirme, siempre voy a estar para ti- Dijo mientras se acercaba a su amigo y le regalaba una sonrisa.

-¿Lo prometes?- Pregunto mientras dirigía su vista al de lentes y se sentaba en la cama.

-Lo prometo-

No hizo falta que dijera otra palabra, me acerque lo suficiente como para poder sentir su corazón latir, me percate como se puso nervioso pues no se esperaba eso, intento alejarse pero yo no lo permiti quería tenerlo cerca mío y nunca soltarlo. No pude contenerme más y lo bese, al fin después de tantos años pude probar sus hermosos labios y dios se sentían increíble, lo apegue más a mi mientras el colocaba sus brazos en mi cuello. Esto no podía ser más perfecto.

-Dios Victor ¿Qué fue eso?- Dijo mientras se separaba del beso.

-Es... lo que te quería decir, desde hace tiempo mis sentimientos cambiaron hacia ti y no lo pude evitar-

- Y-yo no se que decirte-

-Solo dime la verdad...-
*Aún que ya se cual es*

-Es... yo también siento algo por ti pero... desde que conocí a Martha mis sentimientos han cambiado... estoy confundido-

-Tranquilo... no estoy molesto me alegra que me allas dicho la verdad- Dijo regalándole una sonrisa a su amigo.

-Solo dame tiempo para pensar las cosas¿Si?- Dijo dandole un pequeño beso en los labios al castaño.

-El que necesites, yo siempre te voy a esperar-

Marzo.

Fui un idiota, lo arruine, lo arruine, tenía que detenerlo no tuve que haberlo dejado, dios que hice...

Iba caminando cerca de un parque, eran alrededor de las 10 p.m. no tenía ganas de regresar a la mansión solo quería caminar hasta aclarar mi mente, todavía no procesaba lo que acababa de ver, solo recuerdo ir al jardín de la mansión para hablar con Víctor porque ya tenía mi repuesta... pero lo vi besando a Acenix estuve el tiempo suficiente como para saber que ambos correspondieron el beso... lo último que recuerdo fue que tome un suéter y salí corriendo. Estaba demasiado centrado en mis pensamientos hasta que sentí como unas manos me cubrían los ojos, me dio un escalofrío pero yo reconocía esas manos.

-Adivina quien soy- Dijo una chica con una sonrisa de oreja a oreja.

-Mmm no lo se alguien molesta- Dijo de forma burlona.

-¡Hey! Yo no soy molesta- Respondió mientras quitaba sus manos de los ojos del de lentes- ¡Te extrañe Mayucas!- Hablo mientras le daba un abrazo el cual fue correspondido.

-Yo también Martha. Oye ¿Qué haces aquí?-

-Una de mis primas se va a casar y pues soy una de sus damas de honor-

-¿Van hacer la boda aquí o es porque se casa con un español?-

-Ambas- Respondió con una pequeña sonrisa.

-Entiendo, bueno me alegra volver a verte, a pasado un mes desde que no nos vemos-

-Si y bueno cambiando de tema ¿Por qué estabas como deprimido? Si no me quieres contar no hay ningún problema-

-Tranquila, está bien te lo voy a decir pero... es algo complicado-

-Tú tranquilo confía en mí-

-Lo hago, bueno...-

Le conté todo a Martha obviamente saltando la parte donde decía mis sentimientos hacia ella pero en fin ella escucho atentamente y se le veía algo sorprendida pero me mostró su apoyo, después de un rato nos dimos cuenta que ya eran casi las 12 a.m. entonces decidimos hablar otro día, volví a casa por suerte no me encontré a Víctor así que subo rápido a mi habitación y solo espere a que fuera otro día.

-Mayo, tenemos que hablar-

-¿De qué? Creo que ayer me quedo todo claro-

-No, por favor, te juro que no es lo que parecía yo solo...-

-Ahorrate tus excusas por favor, solo sigamos siendo amigos y finjamos que nada paso-

-Pero yo... te amo- Dijo mientras veía como el de lentes se iba de la habitación. Lo avía perdido.