"Paraíso"

CASUALIDAD

Ese desgraciado enano, ¿Cómo se atreve? Agarrándolo desprevenido. La próxima vez que lo vea jura que le cortará la cabeza...

Oh bueno, eso sería exagerado. Hay que tener piedad por el enano y su carita.

Aunque todavía tiene la sensación de aquel beso... Muy horrible, increíble y sorprendente, pero horrible. Fue su primer beso, lo pensaba más bonito.

-... ¿Alastor?, estamos por salir al aire- Dijo de repente un señor robusto y de aspecto intimidante, un poco amargado, o mucho.

-¿Qué? ¡Oh sí claro! Perdone mi estimado amigo, ya estoy listo- Recuperando su cordura se sentó derecho en su banca.

-Bien, empezamos en 3... 2... 1- Dijo como casi todos los días.

-¡Muy buenos días queridos oyentes!, son las 9:00 en punto de la mañana y como siempre es un gusto estar acompañándolos en su rutina diaria. Hoy según el pronóstico, estará nublado casi todo el día, pero no sé preocupen, por suerte no lloverá, tal vez alguna que otra chispita pero pueden estar tranquilos. Sin más los dejo con las 10 canciones que arrancaron su popularidad en ésta semana- Como siempre una excelente presentación.

-Y... Corte-

-Uf, eso estuvo cerca amigo mío ja, ja, ja- Reía raro pero por algún razón tierno.

-Ya deja de fingir, ¿Qué pasó?- Al oírlo se congeló, según él actuó normal, ese hombre sabe cosas.

-Entonces, ¿Vas a soltarlo o no?- Se paró de su asiento y comenzó a acercarse a él.

-No, no es nada- Se estaba poniendo nervioso, desde que conoció a ese enano a estado así.

-¿Prefieres acumularlo en tu garganta?- Se agachó para estar a la altura del moreno ya que estaba sentado- Y ya puedes quitar esa sonrisa de tu cara, no engañas a nadie-

-Está bien, pero no insultes mi sonrisa, últimamente me están insultando mucho- Confesó molesto.

El mayor jaló una silla sentándose para hacer una mueca de que prosiguiera, él lo escuchará.

-... Es que... Fue muy extraño, conocí a un hombre, feo, enano, bravo y muy enano- Primera vez que oye a Alastor hablar de alguien de forma negativa.

-... ¿Y?, ¿Te molestó?- Preguntó para que siguiera platicando.

-Sí, muy molesto, ese desgraciado un día después de conocernos de una manera nada bonita me andaba acosando, es decir, ¿¡Quién carajos hace eso!?- El mayor cambió su rostro a una más seria. ¿Alastor insultando? Algo nuevo.

-¿Y... Lograste escapar de ese idiota?- No es muy bueno consolando pero sí escuchando.

-Pensé en hacerlo, me metí a un callejón para primero averiguar porque me seguia tanto, pero creo... Que no salió como quería- Bajó la mirada.

¿Que rayos? Alastor nunca había actuado de éste modo, bueno, desde hace ya bastante tiempo. Se veía indefenso.

-¿A qué te refieres?, ¿Te hizo algo ese maldito?- Se oía encabronado también.

-... Me da vergüenza contarlo- Susurró.

-Oh, vamos Alastor, no es bueno guardarse las cosas- Cambió su tono a uno preocupado.

-... Lo que pasó... Es que fue... Demasiado confuso, con tal de intimidarlo lo provoqué y...- Se agachó más, casi haciéndose bolita en su silla- Se me acercó y me besó... Pero fue muy salvaje, sentí miedo- Confesó con un susurro que casi no era escuchable.

¿Él?, ¿Sintiendo miedo?

-¿¡Qué!?, desgraciado, ¿¡Quién es!?, ¡Le romperé el osico! Dime dime- Encabronado, salió igual.