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Me has ganado, lo confieso. Poco a poco has ido reservando un espacio en mí para ti, no puedo negarlo. De hecho, tu mirada se ha convertido en uno de mis pasatiempos favoritos, aunque a veces me pueda la vergüenza y tenga que mirar para otro lado cuando tus ojos salen a mi encuentro. 

También admito que me encanta escucharte porque me ayuda a conocerte más a profundidad y, de algún modo, a sentirme parte de tu historia. Desde el principio has tenido la valentía suficiente para mostrarme no solo tus luces sino también tus sombras. Y eso, es digno de admirar, no se me ocurre otra forma más bonita de conectar con alguien sino es a través de lo más profundo de su historia, de sus heridas y sus fortalezas.

Tu transparencia es todo un regalo para mí y una invitación para que yo haga lo mismo. Es cierto que también habrá momentos duros, otros no tan agradables e incluso algunos llenos de incomprensión, pero no me importa si los atravesamos juntos. No te prometo ser perfecto, pero sí que haré todo lo que esté en mi manos, que daré el ciento por uno y que intentaré desligarme de mi orgullo cuando este aparezca con fuerza para poder empatizar contigo.

Es increíble, eres increíble, de verdad. Por una razón o por otra aquí estamos y no puedo dejar de agradecer aquello que hizo posible que tú y yo nos encontrásemos, que conectásemos, que comenzásemos a dibujar los primeros trazos de este sendero.

De alguna manera, todo lo vivido me ha traído hasta aquí, por ello no me arrepiento. Porque cuando el amor llega a nuestras vidas es lo mínimo que podemos hacer: agradecerlo. Porque de cuidarlo y mantenerlo ya nos encargamos nosotros.

Tu presencia en mi vida es mi refugio, mi lugar seguro en medio de la tormenta. Cada momento que compartimos se convierte en un recuerdo inolvidable que atesoro en mi corazón. Quiero que sepas cuánto significas para mí.

Espero que nuestro amor siga creciendo con el tiempo y que enfrentemos juntos cada desafío que la vida nos presente. Eres mi compañera en esta emocionante aventura llamada vida, y no puedo esperar para explorar juntos todos los momentos hermosos que nos esperan.

No puedo evitar pensar en ti constantemente. Tu amor es el faro que guía mis pasos en este mundo. Cada día que pasa, mi amor por ti crece más y más. Eres mi razón de ser.

En tus brazos encuentro paz y consuelo, tu abrazo es mi refugio, y tu sonrisa es mi razón para sonreír. No puedo imaginar mi vida sin ti, y no quiero hacerlo. Estoy agradecido por cada momento que compartimos y espero con ansias un futuro lleno de amor y aventuras a tu lado.

"Aunque sigo en la cama, mis pensamientos van hacia ti, mi Amada inmortal, primero alegremente, después tristemente, esperando saber si el destino nos escuchará o no. Yo solo puedo vivir completamente contigo y si no, no quiero nada .

Sí, estoy resuelto a vagar por ahí, lo más lejos de ti hasta que pueda volar a tus brazos y decir que estoy realmente en casa contigo, y pueda mandar mi alma arropada en ti a la tierra de los espíritus. Sí, desgraciadamente debe ser eso.

¿Serás más contenida y prudente desde que conoces mi fidelidad hacia ti? A ninguna más poseerá mi corazón, nunca, nunca.

¡Oh Dios! ¿Por qué tiene uno que ser separado de alguien a quien ama tanto? Y, además mi vida es ahora una vida desgraciada. Tu amor me hace el más feliz " 

Terminaste de leer aquella carta, y en mi memoria esta grabada ese brillo que apareció en tus ojos, y esa sonrisa enorme que se dibujo en tu cara. Es mi recuerdo favorito. 

𝑴𝒊 𝒗𝒆𝒓𝒂𝒏𝒐 𝒇𝒂𝒗𝒐𝒓𝒊𝒕𝒐 (Enzo Vogrincic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora