Maldita herida que no cicatriza ...
¿O será que aun me sigues ardiendo? , como aquella primera vez que me besaste , robandote todos mis alientos. Para luego hacer conmigo lo que te dió la gana.
Es como no poder pasar página por más que quiera sigue...
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*Amelia Anderson*
Todo no es como las personas creen , una buena vida , lujos , mansión , el carro que quieres y ropa que deseas a tu disposición , la mejor vida! Que va tengo todo eso y la verdad es aburrido mis padres se la pasan diciendo que debo ser buena hija porq tengo lo que otros sueñan con tener , y mientras tanto yo solo quiero ser trasparente no llamar la atención ni llegar en un buen auto para que todos me miren , solo quiero pasar la universidad sin que todos me señalen como la rica creída , por lo menos tengo a Natalia y a Nora que hacen que sienta que soy normal mientras estoy junto a ellas
Soy la típica chica que mientras más transparente quiero ser , es cuando más siento que susurran de mi por los pasillos de la escuela
— Ey! Tu rubia !
La única que me dice rubia y lo permito es Naty , y si soy rubia pero no la rubia que se imaginan de telenovela de piernas largas y cuello fino y cara de revista , soy todo lo contrario , mido 1.61, soy menuda tengo mis curvas pero nada que sorprenda , mi cabello es lo unico que resalta es largo hasta la cintura y obviamente lo que más llama la atención son sus mechones color miel , que si por mi fuera sería negro en este preciso momento pero desgraciadamente mi madre me mataría ya que es lo único que heredé de ella. Con respecto a mi rostro tengo la naríz perfectamente pequeña gracias a dios , ojos color azul oscuro que a veces cambian a grises con el tiempo , y para mala suerte tengo el maldito rostro tupido en pequeñas pecas que se esparcen por mis mejillas y nariz , y unas ojeras que tal parece que soy una drogadicta de mierda.
— Ya voy. — dije de mala gana al notar algunas miraditas hacia mí
Cuando me fuí a acercar algo me mando al suelo , claro! esto tiene que pasarme a mi únicamente , se oían ecos de las risas en el pasillos , un idiota que al parecer no veía por donde iba chocó conmigo y toda su bebida asquerosa calló en mi ropa. Soy una maldita atrae problemas
— Mierda! —maldesí al sentir el líquido frío en mi ropa ,— venga ríete también , si estás loco por hacerlo.— bufé enfadada sacudiendo mi ropa — Callense todos de una maldita vez ¿no tienen en que ocupar su tiempo que no sea reírse de los demás y cuchichiar sin parar? Busquense oficio.— grité— Carajo ! Que los cojan a todos !
Y bueno ahí estoy , cuando no bebo café en las mañanas mi mal humor siempre me acompaña y traigo atada en mi espalda la mala suerte.
— Lo siento. — susurró y estendió su mano para ayudarme a parar del suelo —Es que no vi por do...
— Quita , ya me paro yo solita— manotié su mano y me paré por mi propia cuenta.
Cogí mi cartera y salí cagando leche de ahí antes de que matara a alguien. Me senté sola en una mesa afuera debajo de un árbol en el patio de la Universidad , solo quería desaparecer. Tenía la cara hirviendo de la ira , porque siempre tienen que pasarme cosas malas a mi , ahora que hago con esta ropa toda cagada!. Y tan temprano en la mañana genial.
