Y lo unico que queria hacer es dormir, dormir para soñar con él, dormir para estar con él y vivir en sus sueños una vida junto a él. Por que É𝓵 𝓵𝓾𝓬𝓮 𝓬𝓸𝓶𝓸 𝓾𝓷 𝓼𝓾𝓮ño
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°El dibujo de la portada no es mio, créditos a su respectivo/a...
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Aquino despertó de su sueño una vez más. Frustrado por no haber estado en ese paraíso de imaginación y ficción levanto de mal humor, sus sueños constantemente eran robados por ese chico y que su mamá lo haya despertado para una junta en un lugar caro era lo que menos lo animaba a levantarse y cambiarse para estar presentable en la reunión de ellas y sus más importantes y fieles socios.
Cuando por fin pudo levantarse se puso lo más formal que encontró y se vistió rápido para bajar en donde su madre. Por lo menos ir con ella no significaba tener que ir a un cita con alguien eses día, eso ya era un alivio.
Estuvo bajando los escalones con delicadeza y con cierta gracia mientras su mirada estaba perdida por algún lugar de la habitación. Cuando Aquino miró a su madre vio que al lado de ella estaba Soarinng, un poco más animado fue y corrió a los brazos de Soarinng para darse un abrazo.
Soarinng.- ¿Está vez levantaste mejor?
Preguntó mientras le devolvía el abrazo al mismo tiempo. La madre vio el momento que ambos comparten y dio un suspiro mientras veía a su hijo sonreír cálido.
Aquino vio a su mamá verlo y se alejo un poco de Soarinng para preguntarle qu era lo que le pasaba en su oído, evitando que el otro castaño amante de los pokemon llegue a escuchar la conversación entre él y su madre. Su madre no respondió, solo les dijo que salieran para ir a la reunión, que los estarían esperando desde hace ya un buen rato. Cuando salieron Aquino se chocó con unos ojos amatista, de pronto paró el pasó y se quedo sin respiro. Por su mente pasó el chico que robaba y endulcecia sus sueños y pesadillas.
Aquino lo miro bien y lo analizó de pies a cabeza. El rostro del chico totalmente ocultado, con solamente sus ojos amatista a la vista, dejando ver lo hermosos y cautivos que son estos mismos.
La gorra que llevaba lo hacían ver reservado, la máscara que lleva lo hacia ver interesante, con unas intensas ganas de saber que esta detrás de la máscara. Sus guantes negros y traje del mismo color lo hacía ver elegante. Aquino estaba tan concentrado en el chico y sobre todo en sus ojos que no se dio cuenta que Soarinng tiraba de su manga para llamar su atención una vez más.
Soarinng.- Aquino, pasa algo?
Soarinng se dio cuenta de como su amigo miraba al chico y así que con un sentimiento de celos, abrazo a Aquino y lo llamó más veces, mientras este no parecía escucharlo aún que este tan cerca. Soarinng se comenzaba a hartar, no podía captar su atención y eso lo molestaba, lo hacían sentir en segundo plano y realmente no tan importante. Después de todo Soarinng se acostumbro a recibir atención y miradas diariamente por ser un cantante tan reconocido, así que también era de esperarse esa acción de su parte.
Cuando Aquino reaccionó camino hacia la limosina en la que su mamá también lo estuvo llamando desde hace ya un buen rato, mientras seguía viendo al chico. Primero subió su mamá, luego subió Soarinng y Aquino. Algo que no se esperaba Aquino es que el chico al que estuvo viendo tanto se subiera después de él, quizás podría observarlo un poco más 'disimuladamente'. Aveces Aquino sentía que ya lo había visto en algún otro lugar, era tanto este sentimiento que Aquino comenzaba a marear. El chico misterioso que estaba al lado de Aquino espiro algo alto como sie estuviera incomodo o algo.
Aquino movió su mano y sin querer chocó las yemas de sus dedos con la mano del chico misterioso, algo paniqueado y avergonzado retiro de manera rápida su mano del chico, que sin querer le dio un golpe en la cara a Soarinng que se quejaba de dolor, Aquino toco la cara de Soarinng y se aseguro de no haberle hecho nada, cuando sintió al chico misterioso poner su mano sobre la de Aquino intentando revisar a Soarinng también. Claramente Aquino quitó su mano y se quedo sentado de frente en su lugar mientras tenía sus manos encima de sus piernas, jugando con sus dedos simulando su vergüenza.
Los ojos de Aquino vieron como se estiró el chico misterioso para revisar a Soarinng, dándose cuenta de que el rostro que ocultaba tanto el chico estaba muy cerca a la suya, lo cual le provocó un sonrojo en sus mejillas, tintandolas de un carmín fuerte que fue ocultado por su fiel y acompañante mascarilla color negro. Sus ojos no pudieron evitar ver los amatista que tiene el chico ahora delante suyo, hasta que ambas miradas chocaron y en una mirada intensa que tuvieron ambos ese récord de mirada fija se rompió.
Y fue cuando el chico misterioso se volvió a sentar, que su mamá habló.
.- No sé si te dije Diego, pero el que está sentado al lado derecho tuyo es mi guarda espaldas.
Aquino no pudo decir nada, y solamente asintió para volver a ver al chico directamente a los ojos, notado como este desde hace ya un rato lo estaba observando, que cuando fue descubierto retiró la mirada rápidamente, completamente avergonzado que hasta en la mirada se podía descifrar.
Y fue cuando la limosina aparco. Es hora de que bajan, y de uno en uno bajaron todos en orden.
Ambas personas no paraban de darse miradas de vez en cuando, fue cuando Aquino notó como el chico misterioso se acercó a él para hablar con él
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