CAP 12

4 2 0
                                    


Las cosas se pueden arreglar o poner peor conforme pasaba el tiempo, jamás había prestado atención tanto a su alrededor desde que sintió algo raro como si la estuvieran vigilando constantemente, los vellos de su cuerpo se erizaron, su nariz parecía a la de un perro, sin total control, y sus orejas se movían ligeramente mientras se encontraba paralizada, sentía un hormigueo inusual en su cuero cabelludo.

Podía sentir con claridad que algo sucedía, pero, por más que intentaba no había nada, no veía nada a su alrededor solo estaba ella sola, una horrible sensación amarga recorriendo su ser, los nervios la carcomían, pero en un momento, lleno de valentía, salió corriendo del lugar, pero ya era tarde, alguien la había empujado al acantilado, pudo ver un rostro familiar, antes de que impactara contra el suelo un gran grito y brinco hizo que se despertara.

Sintió unos golpes en la puerta, al darse cuenta que era un sueño, se tranquilizó un poco, pero su corazón latía como un loco.

—JUN, ¿ESTAS BIEN?

El silencio volvió a inundar el lugar, esta vez fue una voz femenina quien hablo con preocupación y un tono un poco lloroso.

—Hermano, ¿estás bien?

Las personas fuera de la habitación se sentían nerviosas, temían en lo que pudiera pasar, aquel hermano, jamás salía de ese lugar, y cada vez más estaba demacrado, y sus ojos no mostraban signos de una persona viva, rara vez lo podían ver.

Su miedo crecía al ver, que la puerta tenia llave y el dueño de la habitación no respondía.

—No hay razón de preocuparse, estoy bien, solo fue una pesadilla pueden volver a dormir, no es nada. — Una voz grave y atractiva sonó como un susurro, pero demasiado claro en la madrugada.

—Buenos días, ¿por qué traes esa cara? — La sonrisa original de su rostro fue remplazada por preocupación, al ver a su amigo.

—Mejor ni me lo recuerdes, no pude dormir toda la noche y menos gran parte de la madrugada.

—Pero si el trabajo solo tomaría gran parte de la noche, no se llevaría toda la madrugada. ¿Estuvo tan difícil para ti?, no lo terminaste?, te puedo ceder el mío.

—Si lo termine, no te preocupes, solo que alguien no me dejo dormir tranquilo, con sus gritos en la madrugada.

Esto es increíble.

—Si como te decía, ella debe estar en práctica, realmente no sé qué está haciendo, pero supongo que está bien. — Alguien fingió hablar por teléfono para que las personas que estaban al frente hablaran más bajo, no quería saber la vida íntima de los demás.

El par se dieron cuenta de esto a FENG no le importo en lo absoluto, pero a Ian, le sorprendió un poco, y un brillo de hostilidad y odio paso rápido por sus ojos, sin que nadie se diera cuenta.

—Sin nada más que decir se despidió de Feng y se fue a su salón, mientras ignoraba, al tipo que los había interrumpido y lo perseguía.

—Eres bueno, fingiendo ser amable.

Estas palabras hicieron que Ian dejara de avanzar, pero solamente se rio burlonamente de sí mismo.

—Sí, tienes razón, pero no soy tan bueno como Tú.

Ambos eran compañeros de clases, pero jamás interactuaron, pero, aunque esta fue la primera vez, pudieron ver claramente, uno atreves del otro.

¿A QUIÉN DEBERÍA CONQUISTAR?.©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora