¿A QUIÉN DEBERÍA CONQUISTAR?.©

CAP 14

Hubo un largo silencio por un momento, hasta que Nari lo rompió.

—Mi hermano solía decir esas cosas.

—¿Hablas de Jun?

—Si exactamente de él, ¿ESPERA, COMO SABES DE él?, NUNCA LO HE MENCIONADO.

—Pues porque ya me lo has dicho y nos hemos conocido.

—Claro que no, nunca lo he hecho.

—Claro que sí, no lo recuerdas, hace más de un mes.

—¿En dónde?

—Pues aquí en tu casa.

—Lay, nunca te he traído a mi casa, esta es la primera vez que vienes aquí—. Se paró de repente y me señalo, todo su cuerpo temblaba del susto, y parecía que quería buscar una escoba para pegarme como a rata en callejón, como si fuera un ladrón un intruso.

—De que hablas, tú me trajiste aquí para que practicáramos, e incluso me dijiste que no me acercara al jardín trasero ni al bosque que está cerca de él, hasta dijiste que tenía prohibido verlo.

—ESO NO ES CIERTO, YO NUNCA TE HE TRAIDO AQUÍ. ¿Y COMO ES QUE SABES TODAS ESAS COSAS?

—Manna, me presentaste a tu hermano más tarde, y nos conocimos debido a que peleamos porque él quería desterrar a una rosa negra que creció en medio de su rosal blanco, además no sé qué fetiches tiene con esa estatua

La última frase fue callada por un fuerte estruendo que asusto a ambas chicas, los pasos fueron tan rápidos y pesados.

Tan rápidos que no les dio tiempo de reaccionar hasta que la puerta se abrió de golpe, en ella apareció la cara de un hermoso joven, se veía como alguien frio y distante, pero a la ves una persona noble de buen corazón, y en cierto punto lo era.

Justo frente a ella estaba Jun, un joven un poco raro y extraño, pero de corazón bondadoso.

—Repite lo que acabas de decir.

—¿QUE?, ¿chicos a que están jugando ahora?, realmente no estoy de humor para esta clase de juegos.

—Hablaste de vidas pasada, también de recuerdos olvidados, dijiste que nos conocemos, pero nunca te he visto, también sabes sobre mi rosal y su anomalía y ni siquiera mi familia sabe que tengo un rosal.

Esta era la primera vez que lay lo veía hablar tanto y aún más hablar tan rápido.

—Chicos me están asustando, me iré a casa, llamare a mi padre o a Sully para que me vengan a recoger.

Hubo un silencio incómodo y cuando Lay se disponía a salir de la habitación, Nari la jalo del brazo, sorprendiéndola.

—¿QUE ESTAS HACIENDO? NO ME ASUSTES.

—Lay, bus-busca en tus contactos y mira si tus padres aparecen en ellos.

—¿De qué hablas ahora?

Jun tenía un presentimiento.

—Hazlo, mira si tus padres están en tus contactos, y si no aparecen tienes que quedarte para hablar con nosotros.

Esta era la primera vez que Jun se sentía tan feliz y emocionado, sus ojos brillaban de entusiasmo, por primera vez había alguien igual a él, alguien con quien podría entenderse en este mundo y no estaría solo.

Justamente minutos antes había estado en su jardín, tubo unas pequeñas molestias en su corazón como si algo fuera a pasar, justo mientras terminaba de regar sus rosas.

Luego de eso había decidido ir a su habitación a limpiarse, y cuando se disponía a dormir escucho susurros molestos que espantaban su sueño, hasta que escucho su nombre, decidió prestar mayor atención.

Y se dio cuenta que aquella persona no era alguien común.

Sus ojos volvieron a la realidad, y vio la mirada nerviosa, confundida y llorosa de la niña, la sabia, ella no encontró a nadie conocido en su registro de contactos, no encontró nada de lo que conocía en su teléfono.

La entendió, no la juzgo, el también paso por algo similar.

Manna se sorprendió luego de su estado de shook al ver a su hermano fuera de su habitación de pie en la habitación de ella, y más aún al verlo como él se acercaba y abrasaba a SU amiga, sabiendo que este odiaba estar cerca de la gente, y más tener contacto con personas que lloran y sultán mocos.

El mundo se está acabando, ¿¡qué pasara ahora?, ¿que su hermano clasista y narcisista, se vuelva alguien bondadoso y tenga un buen humor?, ¡Ja! Como si esas cosas pasaran.