Dolor & Venganza (Lucifer x Alastor)

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Y  mientras tanto en la barra...

—No creo que ese tipo tenga algo así como..."pesadillas", ese tipo de sueños los disfruta— .

—Quizá no tiene las pesadillas que la mayoría de las personas tendrían, pero quizá si tenga...

—No lo creo, para eso necesitas sentir culpa, tristeza, dolor o al menos... algo, con las cosas que ha hecho él...créeme que no es capaz de sentir nada de eso— le explicaba Husk—.

—¿Uh?,¿De quién hablan? — interrumpía lucifer sentándose en la barra.

—Debatimos con Husk si es que el sonrisas alguna vez tiene pesadillas, Husk dice que no...

—Ah, si, si las tiene y se glichea cuando le sucede, también se van sus orejas hacia atrás — hizo un gesto con sus manos a los costados de su cabeza simulando las orejas rojas del sujeto en cuestión haciendo como si se hicieran hacia atrás en una improvisada demostración rápida y con toda normalidad como si fuera de lo más cotidiano saber eso — ¿tienen algún licor con manzana? —.

Husk y Angel observaron al tercero con una mezcla de sorpresa y demasiadas dudas.

—¿Qué?, ¿Es malo beber algo con manzana? —.

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En tanto los días siguientes al incidente transcurrieron con normalidad, en las calles se comentaban los sucesos, habían preguntas y algunos rumores, pero nada que fuera específico o que involucraran a Lucifer o Alastor, aun así, este último continuaría contemplando aquel episodio con cuidado.

Dentro del hotel la dinámica era la cotidiana exceptuando las noches, Al demonio le comenzó a parecer extraño que luego del incendio Lucifer dejase de visitarle con continuidad, además cuando volvía este a presentarse parecía solo " utilizar " su habitación, para leer, para dormir, para escribir, a veces buscaba conversar, pero de forma trivial, no le comentó nada luego sobre el vídeo o los Vees.

—Eh...Lamento ser el portador de esta noticia, pero debo informarte, por si no te has percatado, que... tienes una habitación donde puedes leer, escribir. —

— Uh? — le observó Lucifer, no le había escuchado del todo lo que claramente le molestó al demonio —.

—¿¡Por qué no te vas a escribir a tu habitación!?—

—Pero mi escritorio está aquí. — respondió con simpleza.

Alastor suspiró, a veces le costaba creer que así también era el "temible " Lucifer .

—Es tu escritorio, devuélvelo a TU habitación y escribe allí. —

—Pero no puedo hacer eso —.

—¿Qué?, ¿Por qué no? —.

—No tengo espacio —.

—¡Pero es una habitación gigante! —

—Pero tengo muchos patitos y aún no puedo ..."ordenarlos ".

—¡Solo tirarlo a la basura! — Alastor no entendía esas razones además...que culpa tenia él por esos estúpidos patos de goma.

—¡Pero no puedo hacer eso! — en un alakazam tenía uno de esos patitos entre sus manos, se levantó de su silla y se acercó a mostrarle al demonio — Ellos también son parte del hotel, mira—.

Alastor observó el pato de goma...con cabello rojo, dientes afilados, esa expresión de maldad, orejas y hasta cuernos, lo observó con desagrado.

—Tienes una de estas cosas ...de todos los habitantes del hotel? — tomó el pato desde la cabeza observando lo curioso que era que tuviera tantos detalles de su persona —.