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|la parte blanca del cielo|

18/03

Narra Kurisu

— ¿Cogiste con esa chica? Con razón me vió feo

ya hemos salido del local de perforaciones, sin problema alguno. Ahora Haru y yo damos un paseo y aprovecha para comentarme que estuvo con esa chica de cabello azul que nos perforó, daka.

— relaja la voz Kuri! Tampoco son recuerdos a los que les tenga cariño sabes? —murmura con su cubre bocas, ambos los tenemos.

estamos caminando por el centro buscando una heladería o tienda de caramelos, tengo ganas de algo dulce.

— con razón ella me veía tan mal, de seguro pensó que era una nueva chica tuya o algo así —me rei mientras caminamos entre tanta gente con mi brazo derecho entrelazado con el brazo izquierdo de Haru, caminando de forma un poco desordenada.

detesto Tokyo, ya que detesto los grandes tumultos de gente. Pero con Haru puedo distraerme y olvidarme de todo el ruido que hay a mi alrededor. Él está completamente atento a todo mientras que yo puedo cruzar por dónde quiera como si fuera inmortal.

— lo dices como si tuviera muchas, no soy un promiscuo.

— claro que lo eres!

— eso lo dices porque eres grisexual!

— puede ser, mr fetiches.

en mi vida hay tres personas con una vida sexual muy sociable
N1: Tara
N2: Azuma
N3: Haruchiyo

ellos tres pueden encontrar a alguien bonito, coquetearle y en cuestión de minutos compartir cama con ellos, me parece algo increíble! Son maestros de la seducción. Sobretodo por parte de Haru, cuando lo conocí era más bajito que yo y se veía como el ser más problemático de la sociedad, odiaba a 15 de cada 16 personas.

ahora odia 14 de cada 16. Pero, él no necesita ser amigo de una chica para poder intimar con ella, o saber su nombre, o ni siquiera ser amable. Él puede ver a una chica y determinar solo en cuestión de minutos si le gusta el trato rudo o no. Tiene mucha experiencia y solo necesita observar un poco para saber si su presa es dominante, sumisa, o si me gusta estilo vainilla o lo que sea. Aunque Haru tiene varios fetiches, lo que menos le gusta es el vainilla.

— bien yo entro, que sabor quieres? —me pregunta apenas llegamos a una heladería, es de hecho una muy reconocida por sus postres.

— quiero. . . Limón al agua y cereza con brownie! —digo viendo que este último sabor estaba disponible

—  corazón no puedes masticar el brownie por el piercing ni probar el limon, elige otra cosa. —me recuerda, lo había olvidado completamente, no siento mi lengua.

— oh. . .

me quedé pensando unos minutos, en realidad no me gustan tantos sabores. Mis favoritos son el limón y el cereza, no me gusta experimentar con el helado, siempre pido esos sabores desde pequeña.

— entonces quiero. . . Helado de crema de maracuyá.

le pertenezco a los sabores y fragancias frutales.

Sin esperar otro minuto más Haru volvió a la heladería para pedir los helados, yo me quedé afuera en una pequeña banqueta a esperarlo. Iba a tardar un rato, hay varias personas adentro. Me entretuve viendo a las personas pasar, viendo todo a mi alrededor pasar.

LA CARTA | Ran HaitaniDonde viven las historias. Descúbrelo ahora