Inside Demons [Ashton Irwin]

Capítulo 14: Affectionem

Recogí la mesa después de cenar, tenía que estar en menos de media hora en el bar y aun ni me había maquillado. Menos mal que hoy Josh se había sentido el tío Gilito y le había dado por invitarme y comprar comida china ya que la comida especial íbamos a dejarla para el próximo día, mi favorita por cierto, por lo que lo único que tuve que hacer fue tirarlo todo al cubo de basura. Eché un último vistazo a la casa y cogí una chaqueta de cuero negro que llevaba por debajo una sudadera negra con capucha, súper calentita. Antes de salir me miré en el espejo, pantalones negros de cuero ajustados y una camiseta negra de Joy Divison echa harapos, literal, estaba rota por todas partes menos lo justo para que me tapara los pechos. Mi cara era un desastre, lo solucionaría en un hueco antes de abrir el bar.

Anoche tuve de nuevo otra pesadilla, justo dos días después del encontronazo con Ashton por lo que estoy comenzando a pensar que alguna admiradora barra acosadora está ejerciendo alguna clase de magia negra sobre mi persona. Esta vez la pesadilla había cambiado, me ahogaba en un océano negro. Es que no entiendo por qué todo lo que sueño tiene que ver con morir asfixiada, es agónico y... acojonante. En fin, paso de movidas, me voy a currar.

-¡Josh me llevo el coche!- Esperé a que me contestara pero solo recibí una especie de gruñido desde el sofá, que facilidades tienen algunos para dormir. Una idea oscura cruzó por mi mente, me llevaré su coche que es más pequeño y por lo tanto fácil de aparcar.

-¡Josh me llevo tu coche!- Volví a repetir y recibí otro gruñido, sonreí para mí. Me subí a su Mini Cooper y llegué al curro en menos de veinte minutos, con la suerte de que había aparcamiento justo en la calle paralela. Corrí hacia la puerta trasera que daba a un callejón asqueroso y estaba empezando a llover además. Golpeé tres veces y Mario, el portero, me abrió con una enorme sonrisa.

- ¿What's up linda?- Le sonreí enormemente. Su acento hispánico me alegró la noche.

-Tú sí que eres lindo.- Le solté en español y el rompió en carcajadas. Me quedé blanca, a saber qué coño me había dicho Josh, seguro que le estaba llamando gilipollas o algo por el estilo.

-Gracias.- Y me rodeó con sus brazos de gorila abrazándome, disimulé que sabía que era lo que le había dicho y entré al local.

Recé por no tener que cruzarme con Cyntia pero ahí estaba la muy perra esperándome con los brazos cruzados.

-Llegas tarde.

Miré el reloj sobre su cabeza, había llegado justo a en punto que es la hora a la que tengo que entrar.

-A lo mejor es que tú llegas demasiado pronto.- Le señalé el reloj y ella frunció los labios.

-Si yo le digo al jefe que has llegado tarde, has llegado tarde.

-Haz lo que te dé la gana.- Pasé a su lado apartándola con el codo y entré a el baño, como no, me siguió.

-Claro que hare lo que me dé la gana.- Abrí el bolso sobre el lavabo.

-Me alegro de que tengas voluntad propia entonces.- Saqué un pintalabios rojo mate, agarró mi brazo y me giró bruscamente. Se me cayó el pintalabios.

-Escúchame con atención porque solo te repetiré esto una vez...- La miré a los ojos, tenía ojos llenos de rencor, odio y dolor. Las aletas distendidas de su nariz y sus labios fruncidos me dieron varias pistas de que estaba bastante cabreada.

-¡Estoy escuchando!- Gritó una voz masculina. Desvié mi mirada por encima del hombro de ella y vi a Kyle apoyado en el marco de la puerta. Cyntia se quedó blanca y me soltó lentamente.

Acaricié mi brazo, había un par de marcas rojas por sus dedos.

-Kyle, no es asunto tuyo.

-¡Venga ya! Quiero ver como consigues que todas las camareras dejen el trabajo.- Cyntia se colocó el pelo y se giró hacia él.

-No me puedo creer que me estés culpando de eso... yo... yo nunca...- Kyle elevó una mano hacia ella, en símbolo de que se callara y soltó un suspiro. Cyntia comenzó a hacer pucheros; vamos, esto era de chiste, la zorra haciéndose pasar por el conejo.

- ¿Sabes? Me da igual pero el bar no se va a abrir solo.

-¡Kyle, eso era justo lo que le estaba diciendo!- Abrí mi boca todo lo que mi mandíbula me lo permitió. ¿Pero esta de que va? Me llevé una mano a la frente haciendo un gesto de incredulidad.

-Por favor, no seas así de penosa. Fuera.- Kyle se apartó y ella salió con sus aires de superioridad aunque con el drama de alguien a quien le rompen el corazón.

Nos quedamos los dos solos, él entró en el baño y cerró la puerta. Retrocedí un par de pasos. Se detuvo a unos cincuenta centímetros y se agachó a por mí pintalabios. Le observé en silencio, todos sus movimientos eran muy delicados pero varoniles. Escrutó el pintalabios con curiosidad, me miró y se incorporó. Yo tragué saliva y retrocedí aún más hasta chocar con la pared. ¡Malditas paredes!

Caminó hacia mi hasta estar a menos de un palmo, su mirada vagó por todo mi rostro hasta encontrase con mis ojos, los suyos eran verde manzana... tengo un problema con los ojos de los hombres, me derriten. Se quedó así por lo que a mí me pareció más de un minuto y de repente noté en mi labio entre abierto por mi respiración el pintalabios... ¡me estaba pintando los labios! Admito que esta es la experiencia más rara que he tenido en toda mi vida.

-Un color más oscuro te vendría mejor, resaltaría tu piel.- Solté una carcajada.

-¡Vaya! Pensé que los tíos solo sabían de maquillaje para burlarse de las mujeres.- Él pasó su mano por mi carrillo.

-Tampoco te creas...- Pasó esta vez su dedo por mis labios, yo me mordí el inferior y el chasqueó los suyos.- Oye intenta no hacerle mucho caso a Cyntia.

Salí de mi enturbiamiento, le aparté cuidadosamente sin que pareciera que en realidad le estaba empujando.

-Sé cuidarme sola.- Caminé a la puerta y él comenzó a reírse.

-Como no tengas un diablillo dentro no me explico cómo esa cara de ángel te va a cuidar de alguien.-

Y entonces me quedé petrificada. No había sido muy acertada la metáfora que había elegido. Él se acercó a mí y colocó sus brazos en mi cadera.

-¿Y de quién debería cuidarme?

-De mi.- susurró en mi oído y comenzó a besarme el cuello. Eché mi cuello hacia atrás y le dejé hacer su camino pero cuando iba a besarme me escabullí y salí del baño con paso acelerado, giré en la primera esquina y me apoye en la puerta de salida de emergencia. Sonreí como una quinceañera, era muy guapo.

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¡HOLA!

Chan chan chaaaaaan Kyle y Nayra han tenido encontronazo e.e

Os tengo que hacer la pregunta del millón, ¿a quién shippeais? ¿Nayra-Ashton o Nayra-Kyle? Escribid vuestras respuestas en los comentarios, tengo ganas de saber vuestra opinión.

En estos capítulos ya va a haber algunos encontronazos clave, ya los iréis descubriendo y se irán descubriendo también las verdaderas personalidades de algunos personajes (podéis hacer también vuestras apuestas de quienes son esos personajes que no están diciendo quienes son de verdad).

Os habréis dado cuenta de que el titulo de la novela ha cambiado y es que he inscrito la novela como candidata a los Wattys 2015 en español así que rezad porque al menos ganemos algún premio.

Intentaremos seguir y subir mas de seguido, lo juro.

Muchísimas gracias a todos los que os tomáis un momento para leer y seguir nuestra novela (aunque tardemos mil en seguir con ella).

Besos :)

Alma, Raquel y Elena xx