Había pedido permiso para faltar esa mañana a su trabajo, ya que tenía que ir con la ginecóloga para hablar de la decisión que había tomado sobre la continuidad de su embarazo. Estaba de camino al banco, para retirar dinero que le serviría con los gastos de la clínica. Cuando bajó del taxi y entró a hablar con el banquero, escuchó un freno en seco de un auto fuera.
-Otro rehén más para la bolsa.-Escuchó detrás suyo.
Al dar la vuelta, un hombre encapuchado lo apuntó. No pudo hacer otra cosa que alzar las manos y obedecer las indicaciones que aquel alfa le estaba dando. Lo reunieron con los demás rehenes que venían con ellos y se adentraron aún más en el banco. Le asustaba mucha la situación, ya que era el único omega rehén que tenían y además uno de los atracadores lo miraba demasiado.
La policía no tardó tanto en llegar e iniciar la negociación por ellos. Miraba con terror como iban saliendo algunos rehenes pero él aún seguía allí.
-Por este último, no te pediremos nada en concreto. Nos lo llevaremos con nosotros y cuando los hayamos perdido, lo dejaremos en algún sitio.-Sintió sus piernas temblar cuando oyó lo que tenían planeado para él. No era seguro que cumplan con su palabra de dejarlo en algún punto, tenía miedo de que le hicieran algo.
-No podemos permitir que se lleve a un rehén con usted.-La respuesta del policía lo calmó.
Estuvieron un buen rato discutiendo acerca de lo que harían con él. Por un lado el atracador se negaba a dejarlo suelto y por otro lado, el policía amenazaba con romper las negociaciones y abrir fuego.
-Comisario, el sujeto está hablando por radio y se niega a soltar al último rehén. Dice que lo dejarán libre cuando haya escapado de la policía, en algún punto de la ciudad.-Comunicó por radio el policía.
Al hacer esto el atracador se puso violento y lo primero que hizo fue tomarlo bruscamente para encañonarlo. Los gritos y mezcla de olores, en especial la del alfa que lo tenía sujetado, lo mareaban. En esa situación, se sentía bastante débil e incapaz de hacer algo para defenderse, ya que si lograba zafarse del agarre, los demás atracadores probablemente no dudarían en meterle un tiro.
-A ver neno, te me vas calmando.-Escuchó una voz a duras penas, mientras luchaba por no llorar.
-Cálmense vosotros o le pego un tiro.-Se asustó mucho ante la amenaza y no pudo controlar las feromonas que soltaba en ese momento. Al mirar fuera pudo ver a un hombre vestido de negro, que al instante le pareció atractivo, su lobo se descontroló al verlo y tenía la necesidad de correr a sus brazos.
-Suéltalo.-Le quedó claro que era un alfa al notar la voz gruesa con la que habló en ese instante.
-Lo llevaré conmigo. A decir verdad, no está nada mal.-Cuando sintió la mano del atracador bajar y adentrarse bajo su camiseta, se sintió asqueado. Su persona y su lobo rechazaron aquel tacto sobre su piel.
Seguía mirando al alfa de fuera aún en esa situación, rogando mentalmente de que lo salvara. El olor de aquel alfa invadió el lugar, haciendo notar su enojo e imponiéndose sobre los demás. Vio como algunos omegas policías, bajaban la cabeza en sumisión.
-Suéltalo, si no quieres que te mate.-Escuchó la voz de mando del alfa y su cuerpo quiso entrar en calor, su lobo chilló ante lo sexi que se oyó.
Se sintió poderoso al ver lo que provocó en aquel alfa y el atracador no tardó mucho en soltarlo. Salió por su propio pie del banco, mirando fijamente al hombre imponente que le había salvado la vida. Por su olor, se notaba que aún seguía enojado, así que por instinto empezó a envolverlo con sus feromonas para tratar de calmarlo. Una vez logrado su objetivo, se sintió orgulloso de si mismo. Lo que no esperó fue que aquel alfa llevara su mano hacia su rostro, para limpiar sus lágrimas antes derramadas. Su lobo ronroneó ante el toque y no pudo evitar sonrojarse.
-Voy a registrar al rehén.-No esperó que la policía lo jalara de una forma tan tosca, llegando a apretarle su brazo.- Vete.-Lo empujó.
Su enojó creció por el trato que le estaba dando aquella oficial, ¿quien se creía que era?
-Cálmate un poco, ¿no Vivi?-Su ego se elevó cuando el alfa lo defendió.
-Lo siento jefe.-El asco y celos que sintió, luego de escuchar la voz "tierna" de aquella omega, se podía palpar en el ambiente.
-¿Necesitas asistencia médica?-Cuando esa se fue, el alfa se acercó a hablarle.
-Lo que necesito es una pistola, para volarle la cabeza a ese gilipollas.-Habló sin pudor alguno.
-Te la daría con gusto, pero no funciona así.
-¿Nos hemos visto antes?-Se animó a preguntar, su lobo estaba demasiado inquieto por un alfa que había visto solo minutos atrás. Aquello era bastante extraño.
-Yo diría que no, porque sería imposible que no te recuerde.-Aquella respuesta era la que necesitaba.
-¿Su nombre es?
-Freddy Trucazo, ¿tú?-El alfa dio unos pasos más hacia él y tuvo que alzar la mirada para verlo directamente a los ojos.
-Gustabo García, Gustabo con B.
Se miraron unos segundos, mientras los otros oficiales procedían a detener a los atracadores que tras quedarse sin rehenes y haber sido afectados por la voz de mando del alfa, no pudieron hacer otra cosa más que entregarse. La atmósfera de rompió cuando escuchó un frenazo en seco de un auto cerca de ellos.
-¡Gustabo!-Freddy fue empujado por un Isidoro muy alterado.- ¿Estás bien? ¿No te hicieron daño?-Fue revisado por su amigo.
-Estoy bien Isidoro, no te preocupes.-Dijo tratando de calmarlo.
Empezó a notar el olor agrio que antes había soltado Freddy para salvarlo. Solo podía pensar en que el alfa estaba celoso al ver como Isidoro lo toqueteaba buscando algún tipo de herida.
-¿El bebé está bien?-Sintió la mano de Isidoro tocar su vientre.
Un fuerte gruñido se escuchó.
-¿Cómo que bebé?-El olor de enfado del alfa se volvió demasiado intenso, parecía que perdería el control en cualquier momento.
-Yo...
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Este capítulo me gustó personalmente :(
Quería mostrarles la perspectiva de Gus para este primer encuentro :)
Te miro y te beso <3
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Un omega para el comisario | Freddytabo
FanfictionUn omega embarazado, confundido sobre el momento y el lugar en que concibió, se enfrenta a la incertidumbre más grande: no saber quién es el padre. Gustavo García se encuentra en una situación complicada, pero el destino interviene para unirlo con e...