Comer bien - Yoonseok

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Yoongi escuchaba con atención todo lo que Hoseok tenía por decir, estaban en el patio de la casa del menor, recostados eb en pasto, los padres de Hoseok habían salido en otro viaje, Tae y Kook se encontraban dentro, lo que menos querían era escuchar como tenían sexo, así que se quedaron afuera.

El menor comenzó a hablar de todo lo sucedido cuando eran pequeños, como su corazón comenzaba a palpitar siendo solo unos niños.

Hasta el día que regreso, como esperaba ansioso que tuvieran alguna clase juntos, el anhelo que tenía de verlo en la fiesta que sus padres habían organizado.

— ¿Hiciste que tus padres le castigaran el auto a Tae? — preguntó curioso Yoongi volteando a verlo.

— No tenía otra opción, ustedes siempre andaban juntos, pero al marcharse cada quien iba por su lado, Tae comenzó a ir a mis partidos, pero sin ti, note la atracción que tenia por Kook, entonces pensé que si no tenía auto, haría que tu fueras — sonrió orgulloso.

— Y yo que pensé que había sido coincidencia.

— Olvida lo que dije y cree eso — sonrió pegándose más a Yoongi —. Pensé que no tenias sentimientos por mi, pero al verme, sentir tu mirada en mi, despertó un lado diferente que ni yo conocía, me volví tan provocador, solo quería ser tuyo, aunque fuera durante la cama — explicó sin dejar de verlo.

— ¿Fue planeado lo del baño?

Hoseok negó rápidamente.

— Estaba tan nervioso por que al fin te tenia en casa al mismo tiempo que yo estaba ahí, Kook se burlo toda la tarde hasta antes de irse, entre a ducharme, para tratar de relajarme, cuando te vi entrar, escuchar tus gemidos, una parte de mi quería esconderme para que no me vieras, la otra solo se imagino como seria tener tu miembro en mi boca y bueno, ambos sabemo quien ganó.

Yoongi sonrió dejando un beso más en los labios del menor.

— Me gusto mucho ese lado provocativo tuyo, tan lindo y tierno y tan valiente en la intimidad — confesó sentándose y pasando a Hoseok a su regazo.

— ¿Cuándo te diste cuenta que era algo más?

El palido lo pensó un poco, sin dejar de pasar sus manos por la cintura del menor.

— Esto sonará cursi, pero creo que cuando me defendiste de ese fastidioso chico, parecía que estabas celoso, entonces pensé que yo habría hecho lo mismo de ver que alguien más tratara de tener algo como lo que tenias conmigo.

— Yo realmente estaba celoso.

— ¿Lo estabas?

— Claro que sí, llevo enamorado de ti desde los siete, para que llegara otro y quisiera quedarse con el bonito chico, además no quería que alguien más supiera lo bueno que eres en la cama.

— Seokie — sonrió negando, sintiendo como su piel se ponía rojiza.

— Y tú sabes que nadie, será mejor que yo en tu cama — un tono provocativo se hizo presente.

— Eso lo tengo claro desde aquella noche en el baño — lo pego un poco más.

— Adentro está ocupado y siempre lo quise hacer en un auto — pidió Hoseok moviendo levemente su cadera.

— Sé exactamente a donde ir — el pálido sonrió, besandolo antes de que ambos se pusieran de pie.

Subieron al auto, manejando a una velocidad prudente, Yoongi los llevó hasta un viejo mirador, nadie iba a ir desde que la propiedad le pertenecía a los Min. Apago el auto y volteo a verlo.

— Te amo — no era la primera vez que lo decía, pero le gustaba mencionarlo en cada oportunidad que pudiera.

— Y yo te amo a ti — quito sus cinturón y paso la mano por la mejilla de Yoongi para besarlo.

Acomodo el asiento hacia atrás, ayudando al menor para que subiera a su regazo, su trasero pego en el claxon provocando que sonará.

— Tan grande y fuerte lo tienes — halago obteniendo una risa tímida de Hoseok.

Decir más palabras no fueron necesarias, los besos intercambiados fueron en aumento, más profundos, con más deseo y pasión, las prendas poco a poco terminaron en el asiento del copiloto, Yoongi saco de la guantera una pequeña botella de lubricante.

— Y yo creyendo que fue mi idea — Hoseok soltó una risa, viendo como Yoongi humedecia sus dedos.

— Lo fue — le aseguro llevando su mano a la entrada de Hoseok.

Paso sus dedos húmedos, robando jadeos agudos y bajos, antes de sentir como un primer dedo entraba en su interior, un segundo entró casi enseguida, expandiendo más su interior.

Hasta que estuvo listo, recibiendo el miembro duro del pálido.

— Se siente tan bien — jadeeo cerrando sus ojos, sintiendo como todo el miembro erecto de Yoongi expandía aún más su interior.

— Sin duda — aseguró esperando que Hoseok se acostumbrará, para evitar dolor y solo tener placer.

Las estocadas más profundas, más rápidas, las caricias, los besos, los gemidos, cada sonido que se escuchaba en ese auto, como se movía al mismo ritmo que ellos lo hacían, hasta que ambos casi gritaron de placer.

— Mi novio es el mejor — murmuró Yoongi aún sintiendo esa nube de extasis.

— ¿Novio? — Hoseok se separó un poco, aún sintiendo su cuerpo temblar.

— Si, ¿ya lo eramos no?

— Ninguno lo ha pedido.

— ¿Hice el amor con un amigo? — Yoongi acariciaba la espalda del menor.

— No, es solo que...

Hoseok guardo silencio cuando los labios de Yoongi tomaron los suyos.

— ¿Puedo ser tu novio? — murmuró sin dejar de besarlo.

— Si, solo si tu me permites ser el tuyo.

Yoongi sonrió al escucharlo, volviendo a besarlo.

— ¿Ya puedo hacer el amor con mi novio?

Acomodo un mechón de cabello, Hoseok asintió moviéndose lentamente, sintiendo aún el miembro duro de Yoongi en su interior.

— Cómeme si quieres mi amor — murmuró Hoseok mientras Yoongi cambiaba de posición, dejándolo debajo.

— Comeré muy bien hoy, mañana y siempre, cada vez que te coma a ti mi amor.

Yoongi comenzó a moverse, de forma lenta y profunda.

Hoseok siempre sería lo más delicioso que pudiera comer Yoongi en toda su vida.

Fin.