Para mi Amado ♡Persival y Nasiens♡

7

Nasiens salia del aquel túnel con la cabeza baja el sombrero cubria sus ojos pero cualquiera que lo viera sabría lo destrozado que se vería.
La noche era fresca, Nasiens ya tenía más de ocho meses ahí algunas veces se llegó a topar con uno que otro "principes" o "princesas" ,los hijos del Rey Hada y La Reyna Gigante.

-"Que envidia." - llego a pensar Nasiens sobre aquella familia, mientras llegaba aquel lago cristalino y sin que nadie lo mirara se quito sus ropas, paso su mano por su pecho hasta su entrepierna y conteniendo la respiración se hundió en aquellas aguas.
Paso unos minutos cuando solo asomo su rostro aun con el agua llegando asu hombros cubriendo su cuerpo.
Paso sus manos por su pecho, y el recuerdo de Persival era vago y con un leve rubor recordaba como este había abrazado a su compañera Anne.

-"celos" - hundió su cabeza nuevamente y contuvo sus lágrimas, Nasiens jamás se había sentido así solo en esos momentos que veía asu amigo abrazando aquella compañera, sentía una leve punzada en su pecho y con sus manos rodeando su cuerpo.

-"Por qué no soy...¿por que?."- pensaba para el mismo mientras negaba con su cabeza y empezaba a limpiar su cuerpo.
Después de unos minutos salió del agua seco su cuerpo y empezó a ponerse su ropa, sujeto su sombrero en manos y lo aventó contra el pasto mientras caía arrodillado.
-Persival..- decía bajo, apenas audible mientras sollozaba.

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Los días fueron así venia y iba saliendo de aquel lugar aveces Tioreh le hacía compañía o incluso se divertían haciendo que distrajera y aveces simplemente se quedaba asu lado de el cuerpo inerte de Percival acariciando su cabello con una mirada tan dulce.
Pronto en un par de meses se cumpliria el año en el que percival no despertaba.

Esta vez estaba en su lugar donde hacía medicina tenia un recipiente de color amarillo en manos con un gesto chistoso lo tomo para despues verlo vomitando en una cubeta que tenía dentro de su habitación.

-No..funciono. - dijo, bajo mientras Tioreh volaba su alrededor riendo por las reacciones de Nasiens.
-Jaja, Que gracioso..- volaba de cabeza mirando como Nasiens se limpiaba la boca.
- Tioreh no te rías.- pidió mientras se dirigía a su cama, la habitacion donde se quedaba pronto se lleno de frascos, plantas, libros y cosas de más y en una ezquina con sumo cuidado estaba una capa naranja y un casco, Tioreh se acerco hasta Nasiens y le dio unas palmadas en la espalda.

-Lo vas a lograr Nasi~.- dijo, para despues retirarse y dejarlo solo en aquella habitación, Nasiens enterró su rostro en una almohada.

"Lo voy a lograr, solo necesito esforzarme." - Pensó Nasiens para quedarse dormido.

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Mientras tanto Diana y King los Reyes del bosque hablaban a solas.

-¿Deberíamos?- dijo, Diana quien tenía en sus manos al Rey Hada, quien solo se mantenia entre las manos de su amada.

- Me preocupa Mirtus y los niños - dijo, mirando asu amada, la cual desde hace meses había estado tan nerviosa.
Diana lo sabía desde la primera vez que vio a Nasiens.

"Mi bebe"

Diana era una madre amorosa, amaba Asus hijos por igual, eran sus bebés, sus niños.

-No puedo, King.- dijo, con ojos llorosos ella deseaba decirles asu niños que aquel chico que le decían humano realmente no lo era y que la verdad era su hermano.
Diana no podría, sabía que no solo la noticia sería algo impactante para sus hijos si no para Mirtus su niño humano por el cual habían cambiado su primer hijo.

-Deberíamos decirle a Nasiens primero.- propuso King, quien voló hasta estar frente a su amada.
Ella negó, Nasiens estaba pasando por mucho, su bebé había pasado por mucho fuera de su proteccion, fuera de lo que realmente era su hogar, Diana aún recordaba la primera vez que lo vio y lo sostuvo en sus brazos, para despues perderle y aun recordaba la desesperación que sintio cuando fue haber a sus niños dormidos el color de cabello de su primer hijo era diferente y la pequeña carita que había visto por primera vez no era la misma, ella dio el grito en el bosque mientras llamaba a su amado era un recuerdo que había hecho marca en su corazón.

"¡¿Donde esta mi bebe?!"

King también lo recordaba lo destrozada que había estado su amada pero aquel bebe no tenía la culpa, pronto tras buscar a su primer bebé y no encontrarlo, Diana no podia abandonar aquel bebé Mirtus.

-Tan siquiera merecemos decirle,¿ que cambiará?- dijo, Diana con una mirada que hacía que el corazón de su amado doliera.
-Es nuestro..-  no termino de hablar cuando el dedo de la gigante cubrió su cara.
- No merecemos que nos llame Padres, el ya tiene asu familia, un abuelo que lo espera y una hermana..- la voz de la gigante era entrecortada mientras lo decía.
-Diana, ¿como?.- pregunto King mientras la miraba.
-Tioreh, me lo contó al parecer se llevan muy bien.- King solo se acerco y acariciaba la mejilla se su amada con sus pequeñas manos y los sollozos eran bajos de ambos.

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Bueno aqui el capitulo, muchas gracias por leer realmente no pensé que llegaría más de 900 vistas realmente me emociona y disculpen cualquier error...

GRACIAS♡