MARVEL: CAMINO DEL JUGADOR

CAPITULO 17

Después de mi pequeña revelación a los X-Men sobre la situación de Jean, tomamos el X-Jet y nos reagrupamos en la Mansión X, donde comenzamos a planificar y discutir la situación con más profundidad.

"¡Casi mata a Raven!" gritó Hank, golpeando su puño peludo contra la pared, "si no hubiera sido por él", me señaló, "la empalada habría sido Raven..." casi susurró la última parte, asustado incluso de hablar de esa posibilidad. en voz alta.

"Sin embargo, no lo hizo". Charles respondió, mirando a Hank, "Jean sabía lo que estaba haciendo hasta cierto punto", ante esto levanté la mano.

"Sí, no... tiene razón... si no hubiera sido por mí, Raven se habría convertido en un souvlaki mutante", dije, "Mira, la única razón por la que no fue empalada fue porque usé mi cuerpo como escudo. y mi telequinesis para proteger su cuerpo, si no hubiera hecho eso, ambos hubiésemos terminado como... un mutante rico y lleno de nutrientes souvlaki."

"¿Es todo esto una broma para ti?" Scott gruñó su brazo ahora mejor gracias a Bestia.

"En realidad no, pero ¿qué más se supone que debo hacer? ¿Llorar?" Puse los ojos en blanco.

"Jean nunca habría matado a Raven", dijo Charles, en tono firme.

"No a propósito, pero... ya no está haciendo nada a propósito, ¿verdad?" Profesor, este tipo tiene que estar entre las diez personas más estúpidas que he conocido.

"Dejemos de pelear por un momento y pensemos en cómo podemos ayudar a Jean", decidió intervenir Raven, que había permanecido en silencio hasta ahora.

"¿Hay algún otro lugar al que iría en un momento como este?" Yo pregunté.

"No que sepamos..." murmuró Ororo.

"¿Algún lugar amigable para los mutantes donde pueda esconderse?" Sabía dónde estaba, simplemente no quería tener más banderas sobre mi cabeza, ya estaban cuestionando cómo carajo sabía de la Fuerza Fénix, lo último que quiero es darle una nueva razón al bastardo calvo para tratar de cuidarme *.

"Ella... podría estar con Erik", murmuró Raven al darse cuenta, con los ojos muy abiertos ante esto.

Finalmente, alguien captó el anzuelo que le puse: "Eso parece plausible". Asentí, con una sonrisa en mi rostro.

"Sabías que..." Charles murmuró, "Sabías sobre la condición de Jean, sabías sobre... su posible ubicación..." era... estaba leyendo mis pensamientos superficiales otra vez, ¡ESO ES MIERDA!

"Eso es todo, ya terminé con tus tonterías moralistas", gruñí golpeando mi puño contra la mesa rompiéndola por la mitad mientras empujaba al profesor de su silla con mi telequinesis, "Me voy, arreglaré las cosas a mi manera. "

"No irás a ninguna parte", amenazó Scott, con la mano derecha en la visera, listo para atacarme en cualquier momento.

"Adelante, dispara, te lo garantizo... será el último." Todo este lugar era una mentira, un castillo de naipes para acariciar el ego de Charles, y estaba cansado de sus tonterías, al igual que con las de Scott.

"¿Por qué a ninguno de ustedes les molesta esto?" Charles preguntó desde el suelo, volviéndose hacia Raven y luego hacia Hank, "Él sabe más... y se niega a decirnos..."

"Sé cosas, muchas cosas horribles", admití con una risa amarga, "pero lo que sé de Jean, ya lo compartí con todos ustedes, pero sí, pensé por un momento que ella estaba con Erik, basado en su historia con el chico, pero no estaba seguro", esto también era cierto, con el cambio de la línea de tiempo como está ahora, no estaba seguro de que ella tuviera una razón para ir con Magneto de todas las personas, todo lo que sabía es que Esto todavía era una posibilidad, nada más. "Pero, francamente, estoy cansado de esta mierda contigo, Charles, hablas de moralidad, de cómo debemos ser aceptados, de cómo debemos seguir las reglas, pero cuando surge la situación en la que debes ser todo lo que supuestamente te opones... No dudes en aceptarlo... Quiero decir, Charles, ¿está bien desde el punto de vista moral violar mi mente sólo porque crees que tengo información que podría ayudar a Jean? Si tuviera alguna, la compartiría, no porque me importe, ¡ME IMPORTA UN MIERDA, PERO ME IMPORTA EMILY! Rugí al final.

"Alex..." suspiró Ororo, su mano en mi hombro para apoyarme.

"Bueno, dije lo que tenía que decir y ahora me voy", los saludé con la mano y les di el pájaro a Scott y Charles mientras comenzaba a salir de la oficina.

"Dije que no-" El chico láser no pudo terminar, ya que lo abofeteé con suficiente fuerza para doblarlo, obligándolo a escupir un diente.

"Por favor... no te vayas..." Dijo Raven, interceptándome en la salida.

"No me quedaré y ayudaré mientras ese tipo", señalé a Charles, "lee mi mente como un maldito periódico... pensamientos superficiales o no, ¡son mis pensamientos! No tiene derecho a leerlos sin permiso".

"No volverá a hacer eso", prometió Raven, "¿No es así, Charles?"

Charles suspiró, luciendo exasperado, enojado incluso por lo que Raven le estaba preguntando. "Supongo que puedo aceptar eso..." como si fuera a creer eso.

"¿Aceptar?" Me reí, "No tienes otra opción, porque cree, la próxima vez que leas mi mente a la fuerza con la idea de que sé algo que puede arreglar mágicamente a Jean, bueno... digamos que empujaré tu silla de ruedas por las escaleras de la montaña Niesen ... y veremos qué tan bien lo haces entonces..." Sonreí. "Y independientemente de eso... ya terminé con esto... ayudaré, pero lejos de este gusano".

"Nada de eso", Raven frunció el ceño, "Sé que hace cosas estúpidas, créeme, lo sé, pero... esto... eso de macho de amenazar a otros, tiene que parar".

"No es una amenaza Raven, es una promesa, quise decir cada palabra que dije, y sé que ustedes lo protegerán... pero aún así lo haré si vuelve a hacer esta mierda, diablos... solo por esta vez, lee mi mente, Charles, y mira lo decidido que estoy..." Le sonreí.

"Yo... de todos modos, debemos contactar a Erik", dijo Hank, interrumpiendo la conversación.

"Ustedes hagan eso, yo haré otra cosa de mi parte", les informé.

"¿Qué?" -Preguntó Ororo.

"Bueno, un poder tan grande... seguramente tendrá idiotas tratando de controlarlo... idiotas que necesito evaluar", respondí.

"¿Crees que alguien está cazando a Jean?" Preguntó Charles, con preocupación en su rostro.

"Sí", asentí, saliendo de la habitación.