MARVEL: CAMINO DEL JUGADOR

CAPÍTULO 165

Miré a Ancestral, la piedra del Tiempo flotando limpiamente sobre mi mano, y con una sonrisa seguida de un suspiro, pregunté: "Entonces, ¿qué hago ahora?"

Ancestral me miró, pidiendo una taza de té caliente, mientras se sentaba en su escritorio, "Úsala, mira en el pasado, luego en el futuro, la piedra debería ayudarte, de una manera que nadie puede hacerlo".

Bueno, supongo que no hizo daño mirar.

"Muy bien entonces", me reí entre dientes, abriendo un portal a mi casa, "Hasta luego".

"Cuídese, Sr. Walker", Ancestral le devolvió la sonrisa, tomando un sorbo de su humeante taza de té.

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De regreso a mi apartamento, me senté en mi sofá, pensando qué hacer y cómo abordar el problema, frunciendo el ceño ante toda mi situación, mientras miraba la piedra que Ancestral me había confiado con una mirada perdida.

Quizás necesitaba un descanso.

Sólo necesitaba no pensar en... bueno, esto.

"Oye", Bucky me saludó con la mano, llamando mi atención, "¿Qué es eso?", Señaló la Piedra del Tiempo con su mirada generalmente aburrida.

"La clave para controlar el tiempo", respondí con una sonrisa.

"¿Dónde fue eso cuando quería dormir hasta tarde en segundo grado?", Respondió Bucky con una sonrisa propia.

"Puedo identificarme con eso, todos pueden", me reí.

"Entonces, ¿qué está pasando?", Preguntó Bucky, caminando hacia la sala de estar y tomando asiento justo frente a mí.

"Nada", respondí.

"Alex, te conozco", resopló Bucky, "Sé cuando algo está sucediendo y algo está sucediendo ahora mismo, entonces, ¿qué es?"

Él realmente me conocía bien, ¿no? Supongo que era de esperar, considerando que vive conmigo y es uno de mis amigos más cercanos.

"Bueno", suspiré, comenzando a explicarle toda la situación, desde Hank, hasta el ser todopoderoso que posiblemente podría ser una amenaza, durante toda la cobertura, Bucky simplemente se sentó allí, escuchándome, hasta que terminé.

"Zombis, ¿eh?" Bucky suspiró, "Leí algunos libros sobre eso, pero... creo que los zombies de los que estás hablando no son de los que he leído, ¿verdad?"

"No", negué con la cabeza, "A diferencia de los libros, estos zombis mantienen sus habilidades y conocimientos, y bueno, puedes imaginar cómo resultaría un brote".

"En unos días la tierra estaría plagada", suspiró Bucky una vez más.

"Sí", asentí, chasqueando la lengua.

"Y, para colmo, tenemos un... Dios de algún tipo, como el responsable del virus zombie", añadió Bucky.

"Sí, según lo que sé, sí, él fue quien trajo el virus cuántico aquí", asentí.

"Eso se siente... barato, de alguna manera", murmuró Bucky pensando profundamente.

"¿Qué quieres decir?" Pregunté, inclinando mi cabeza hacia un lado.

"Bueno, él es un Dios, como... uno real, ¿verdad?" preguntó Bucky, y yo asentí, "Entonces... ¿por qué los zombies?"

"¿Quizás está jugando conmigo?" Me encogí de hombros.

"No... no es eso," Bucky sacudió la cabeza, "Mira... de todas las cosas que pudo haber hecho... envió una amenaza que estabas preparado para sellar, él debe saber si es tan poderoso como dices, qué es, los límites de tu alcance y, sin embargo, eligió un obstáculo que estabas completamente preparado para afrontar".

Parpadeé, tenía razón, el Beyonder podría, como soy ahora, hacerme desaparecer y, sin embargo, estaba jugando cualquier juego que estuviera jugando de manera muy pasiva, diablos, si quisiera follarme, podría haber enviado el virus a la Tierra, en lugar del casi inalcanzable Reino Cuántico.

"Creo que te está poniendo a prueba, o este ataque no estaba dirigido a ti en absoluto", dijo Bucky, "Eso o alguien lo está vigilando".

"Solo hay uno encima de él, y dudo que ese tipo me defienda", respondí, después de todo, qué razón podría tener el ser más fuerte del universo para protegerme, "lo que deja solo las pruebas, y las no dirigidas a mí".

"No lo sé, realmente no puedo entender toda esta situación, algo simplemente no encaja, y no sé qué", suspiró Bucky, encorvándose en el sofá con un gemido. "La vida contigo nunca es aburrida, ¿no?" añadió con una sonrisa.

"Ojalá lo fuera," me reí entre dientes.

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[Thor Odinson POV]

Después de un día de espera.

¡Las dos hachas que había encargado estaban listas!

Apenas pude contener mi sonrisa, mientras miraba las hachas, incrustadas con mi poder, pronto Alex podría usar mi trueno para vencer a sus enemigos, ¡y yo estaría allí junto a él, luciendo poderoso! Guapísimo.

"Thor, ¿estás listo?" —preguntó Sif.

Asentí, poniendo las hachas en una caja de metal ya que era tradición que el guerrero en cuestión rompiera brutalmente la caja para obtener su regalo.

"A Alex le encantarán", sonrió Sif.

Resoplé, por supuesto que lo haría, ¡fue un regalo mío! Su hermano, no había otra opción que amar este regalo con cada... cómo se decía... ¡fibra de su cuerpo!

"Lo sé", asentí con una expresión engreída, "los compré, me costaron una fortuna".

"Bueno, están hechos completamente de Uru y de tu poder... así que supongo que al rey Eitri le tomó más tiempo de lo habitual", se rió Sif.

"De hecho", asentí con una sonrisa.

"Con regalos como ese, casi siento que estás tratando de competir conmigo por su afecto", bromeó Sif.

"¡Ja! Qué gracioso", le puse los ojos en blanco, agarrando la caja de metal donde estaban las hachas con una mano.

"Pero hablando en serio, con regalos como ese, el mío siempre parecerá barato", se rió Sif.

Puse los ojos en blanco una vez más, "Tú eres su mujer, duerme con él y el idiota estará sonriendo durante una semana".

"¡Thor!" Sif jadeó, seguido de un ataque de risa.

"¡¿Qué?! Es verdad, nosotros, los hombres de verdad, simplemente, ¡danos comida, sexo, productos para el cabello y armas, y seremos tan felices como podamos!" Asentí, era la pura verdad.

"¿Productos para el cabello?" Preguntó Sif, su risa se convirtió en una risita.

"Sí, ¿de qué otra manera crees que se ve mi cabello?", La tonta Sif, ignorante de los misterios de los hombres.

CÓMO SE VEN LOS EJES.