Entre el Amor y el Odio... (Hades x Shaka) (Milo x Shaka)

~ Capítulo 13. Hacer el Amor con Otro... ~

Virgo se siente cansado, además como satisfecho en algo. Quiso voltear, pero unas manos siente en su cintura. Ahora que lo piensa no está en su habitación, trata de hacer recuerdo y de tanto forzar recordó absolutamente todo. Quien está a su lado abrazándolo es Hades, el Dios del inframundo y terminaron juntos en la cama. Esto debe ser un simple error, pero todo lo que recuerda es la realidad, no debió estar con el Dios del inframundo porque le está dando la probabilidad de entrar a su vida.

~ Horas antes en el inframundo... ~

Desde esa última vez que le dijo la verdad respecto a no darle una oportunidad de conquista no ha visto para nada a Hades, de hecho, ya ni lo busca y es lo mejor, no va negar conoció una parte no vista del Dios, pero simplemente no desea estar con él en algo romántico y es también porque hay una maldición, por así decirlo, entre los mortales y deidades, según comentado por Athena... "Un humano y un Dios no pueden estar juntos porque ocurren tragedias"... recuerda muchos mitos antiguos de como los humanos se relacionaban con estos seres omnipotentes y terminaron muertos, maldecidos, convertidos en animales o hasta sufriendo por ese amor. Por eso, no le dará una oportunidad a alguien como Hades, aunque ni debería meterse con alguien casado porque recuerda que el Dios está casado con Persefone.

Eso no importa del todo mejor realizada algunas actividades en el lugar. Camina tranquilo hasta que escuchó y siente un estruendo en todo el lugar dejando tan sorprendido. Iba seguir su camino, pero salieron unos espectros corriendo de donde es el salón principal, uno de ellos se cayó a medio camino así que Virgo lo ayuda nada más por educación.

— ¿Qué está ocurriendo? —Indaga sereno Shaka.

— El señor Hades está furioso. —Dice el espectro con miedo— Si aprecias tu vida ni si quiera entres.

Al final el espectro salió corriendo cuando hubo otro estruendo, puede hacerle caso al espectro y no molestarlo con lo ocurrido, pero por una parte sabe que es su culpa para estar en ese humor por su rechazo de hace horas antes. Después de pensarlo por muchos minutos al final tomó una decisión, así que se dirigió a la puerta y la abrió sin problemas dejando ver cómo lo suponía un Dios del inframundo muy enojado que hasta un aura oscura lo rodea con ganas de matar a alguien.

— ¡Ya les dije que no quiero a nadie conmigo! —Iba a lanzar su ataque contra la persona quien iba entrando, pero al ver paró su enojo.

— Sabe que sólo está asustando a sus espectros. —Dice sereno cambiando hacia él y ya estando en frente verlo manteniéndose serio ante él— No pensé le dolería lo que le dije.

— Pues como no va doler tus palabras. —Frunce el ceño— Prefieres al padre de tu hijo en vez de una deidad como yo.

— Por eso mismo... porque es una deidad y las relaciones con los humanos terminan muy mal.

— Son tonterías eso.

— Además es un hombre casado.

— ¡¿Casado yo?! —Carcajea ante esto— Yo nunca he tenido algo formal por siglos.

— ¿Y donde deja a su esposa Persefone? —Indaga.

— Ya veo. —Vuelve a reír— Eso es un mito. Si la secuestre, pero hubo una gran confusión en el relato por culpa de Démeter. La de secuestre porque alguien la asechaba y no iba a permitir que tocaran a mi sobrina por ello me la traje al inframundo y pues fue su voluntad comer los frutos porque hicimos una buena amistad, pero se quedó esa leyenda que yo la volví reina del inframundo cuando ni si quiera lo es, pero tampoco lo hemos desmentido. Simplemente somos grandes amigos y familia, una relación tío y sobrina.