Había una vez, una chica que veía el mundo en poesía, ella decía "Soy poeta, mi vida es una poesía, pero no lo entiendes" a ella siempre se le veía con un diario, en el que escribía poesía, lo decoraba a su gusto, escribía sobre todo lo que le pasaba.
Pero un día está chica conoció a alguien y sintió que su poesía tomaba más sentido, escribía por él, para él y de él, en su mente solo estaba él. Hasta llegó a pensar que estaba algo loca, no podía creer como un sentimiento la podía poner así ¿Qué era esto? ¿Por qué ese chico la volvía así? Ella pensaba que sería algo momentáneo pero los meses pasaban y supo que estaba irremediablemente enamorada de él, pero ella no quería, ella decía.
"Ese chico no se podría fijar en mi ¿Podría tener algo con él?"
Inesperadamente ellos empezaron a hablar, a conocerse, y lo que ella pensó que no pasaría, pasó. El amor estaba en ellos, y ahora con más razón ella escribiría poemas, poemas que todos llegaban a las manos de ese chico, y la felicidad en él al recibirlos era algo que a ella la ponía contenta.
Pero no todo puede ser color de rosa, una tristeza empezó a invadirla, muchos les decían como podía estar con él, si eran tan diferentes, ella no prestaba atención a eso, su única felicidad era él, los problemas crecieron como una bola de nieve y llegó a lo que ella le tenía miedo, el tener que separarse de él, cuando eso pasó, la noche no se había sentido más fría hasta ese momento, sentía que algo se rompía en ella, que algo se había ido en ella, como si su alma saliera, la tristeza no salía con lágrimas y no sabía porque no lloraba pero ¿Se necesitan lágrimas para estar triste? Ella actuaba normal, como si no hubiera pasado nada, pero solo sus escritos sabían lo que pasaba, su corazón se llenó de enojo y tristeza, y en donde una vez hubo amor ya no quedaba nada. El tener que verlo casi a diario, era algo que no soportaba, las canciones que alguna vez compartieron hacia qué lo recordara más, y lo peor era que aún tenía algunos poemas que le había escrito y cada vez que podía ella los leía y recordaba todos los momentos que tuvo con él, pero solo eran recuerdos.
La tristeza llegó, y las lágrimas de pronto salieron, en su mente seguía él, hacía de todo para sacarlo de ahí, pero llego a la conclusión que no haría nada para sacarlo de su mente, pero no podía seguir con ese sentimiento, por lo que para finalizar esa historia, decidió escribir un libro en el que escribiría todo sobre él y ella.
Cuando finalice ese libro, terminará todo, o eso cree porque solo ella sabe que nunca lo olvidará, claro que no lo hará, fue su primer amor aunque suene cursi, ella quería todo con él, pero al parecer no todas las historias románticas terminan con un final feliz, solo finales y de nosotros depende como queremos recordar ese final.
La historia a un primer amor solo comienza.
