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El oficial envolvió a Sanji entre sus brazos, sintiendo cómo su cuerpo temblaba. Con cuidado, trató de examinar las heridas del rubio, pero este evitaba su contacto, escondiendo su rostro en su hombro. El rubio no quería que Zoro lo viera en ese estado lamentable.

—Debemos irnos, no podemos quedarnos en este lugar. Los demás se llevaron a esos malnacidos. No hay nadie más aquí, Sanji—, murmuró el peliverde suavemente en su oído, ofreciendo cargarlo hacia el auto que los esperaba. Sanji asintió avergonzado, sin poder mirarlo a los ojos.

El oficial cubrió el cuerpo del otro con un edredón más grande y ocultó su rostro para proteger su identidad de las miradas curiosas de los vecinos. Con varios oficiales controlando a la multitud, subieron al auto, donde el peliverde colocó a Sanji en el asiento muy cerca de él, ya que se negaba a soltarse, e indicó al chofer la dirección adecuada. Transcurrieron varias horas y el auto se estacionó en la cochera. Zoro descendió primero y cargó a Sanji con cuidado, mientras varios agentes ya se encontraban en el lugar. Dejó a Sanji en una de las habitaciones y se unió al equipo en la sala.

Ussop, Nami, Robin y Violet estaban presentes.

—Oficial Roronoa, ¿Cómo está él?—preguntó Ussop mientras lo miraba sentado en el sofá.

—Sigue en estado de shock, está demasiado callado. Necesita mucho de tu ayuda. Debemos ser cuidadosos para no perturbarlo—, respondió Zoro.

—Estaré con él, con permiso chicos—, dijo el psicólogo mientras se retiraba hacia la habitación donde estaba Sanji.

—Nami, ¿Cuál es el estado del oficial Luffy?— preguntó Zoro mientras Nami le pasaba una pila de documentos.

—Está estable. Recibió tres tiros, ninguno en puntos críticos. Uno en la pierna, otro en el hombro y otro en el costado del abdomen. Está descansando y dándole problemas a las enfermeras—, informó Nami, cruzándose de brazos.—El problema ahora es que tenemos a Ace libre y a Doflamingo aún operando en Kioto. Rosinante logró mover el operativo, pero no sabemos si podremos atraparlos. Los agentes encubiertos aún están buscando más información, pero esto se está complicando

—Después de este incidente, la seguridad del chico debe ser una prioridad absoluta. Sin embargo, hay algo más que debemos considerar. Doflamingo es capaz de cualquier cosa, incluso de eliminar a sus propios subordinados si llega a creer que ya no le son útiles o si sospecha de ellos. Esto nos lleva a concluir que su interés en el muchacho es mucho más profundo de lo que inicialmente pensábamos.—Violet hizo una pausa, su expresión seria reflejando la gravedad de la situación. —Además, Judge, por más despreciable que sea, se negó rotundamente a asociarse con él. Incluso rechazó la propuesta de convertirse en el fabricante de la droga que Doflamingo estaba patentando en ese momento—, suspiró Violet, su voz cargada de un pesar profundo. —El hecho de que ese enfermo conociera a Sanji cuando era apenas  menor de edad sugiere que en su mente retorcida, lo ve como un posible 'activo' para su despreciable burdel, en caso de que Ace deje de ser útil

Zoro sintió el peso de las palabras de Violet, aumentando su intranquilidad y furia hacia esos hombres. 

—Aumentaremos la seguridad y redoblaremos nuestros esfuerzos para proteger a Sanji. Debemos comenzar a planear estrategias más eficaces y reunir todos nuestros recursos disponibles. Es hora de asegurarnos de que no puedan llegar hasta Luffy. Ese idiota se ha involucrado demasiado, y estoy seguro de que ha estado detrás de Ace desde el principio

Sus palabras fueron recibidas con un asentimiento unánime por parte del equipo, quienes compartían su determinación de poner fin a esta amenaza de una vez por todas. Nami asintió ante las palabras.

𝕌𝕝𝕥𝕣𝕒𝕧𝕚𝕠𝕝𝕖𝕟𝕔𝕖 ||| ᴢᴏꜱᴀɴDonde viven las historias. Descúbrelo ahora