Bar sin salida de Gotham

#15: Entra el delirio

#15: Entra el delirio

Con una sonrisa en mi rostro y una canción en mi corazón, contemplé mi reino. Oh, eso fue un pensamiento. Quizás debería pensar en conseguir música en vivo para el bar.

Quizás podría conseguir que Black Canary cante aquí. O conseguir que John Constantine resucite la banda de punk de su juventud. Creo que incluso algunos miembros de la Bat Family incursionaron en la música. Sería un placer ver a algunos de ellos actuar aquí.

Sabía que Lucifer hizo algo similar con su barra. Aunque era más partidario de actuar él mismo que de dejar que otros fueran el centro de atención. No quería que me vieran robando su estilo pero un pequeño concierto aquí y allá no vendría mal, ¿verdad?

Lucifer era alguien de quien yo era muy consciente. Era uno de los seres verdaderamente omnipotentes de este universo. Era uno de los dos seres que podían aspirar a igualar la Presencia, la versión del Dios bíblico de DC; el otro era su hermano Michael. Todo el canon bíblico tuvo lugar fuera del tiempo mismo, pero él era fácilmente tan interminable como Didi y sus hermanos. Al mismo tiempo, era más poderoso que ellos, especialmente cuando trabajaba con la Fuerza Demiugica de su hermano. Entonces podría crear multiversos enteros.

Algunos podrían preocuparse cuando se enteraron de él y de lo que estaba haciendo en la Tierra. Yo no. No podía imaginar que se convirtiera en un problema para mí, para Didi o para Dead End. Juego reconocido. Cualquiera que abandonara la jerarquía celestial para dirigir un piano bar en Los Ángeles tenía la cabeza puesta en mi libro. Estoy seguro de que él sentiría lo mismo por mí.

Así que no estaba tan preocupado por Lucifer, el Diablo literal. Su existencia actual no era tan aterradora como la Biblia lo presentaba. ¿Quién hubiera imaginado que el libro escrito por mortales que no estuvieron allí durante los acontecimientos que escribieron sería falible?

En todo caso, parecía un tipo genial. Ya estaba considerando invitarlo a tomar una copa o dos si no aparecía primero sin avisar. Didi podría considerarse una especie de prima lejana para él en algún sentido de la palabra. Las relaciones a nivel de los seres cósmicos se volvieron así complicadas porque técnicamente todos estaban relacionados con la existencia misma.

Como dije, juego reconocido. Probablemente le gustará mucho lo que estaba haciendo aquí con Dead End. Incluso podría tomar notas. Por muy divertido que fuera no creerle cuando afirmaba ser quien realmente era, tal vez le gustaría seguir mi ejemplo e infundir en su dominio la fe en sus palabras. Ciertamente mataría por ser una mosca en la pared cuando su audiencia se diera cuenta de que realmente estaban escuchando al Diablo tocar el piano y bebiendo su licor.

Tomando nota de hablar con Didi sobre la posibilidad de convertirme en amigo por correspondencia del Diablo, volví a observar mi bar. The Dead End volvió a funcionar. Los clientes habituales habían vuelto, sentados en la barra como si nunca se hubieran ido. Los matones y matones siguieron el ejemplo de los villanos. Incluso las masas anónimas de Gotham estaban regresando cuando se corrió la voz de la desaparición del Joker.

Eso era algo que había que ver para creer. Y con el castigo que Didi y yo decidimos para Joker, eso fue posible cuando visitaste el Callejón sin salida. En el espejo detrás de la barra, todos los que entraban podían ver el fantasma del Joker.

Red Hood era ahora un invitado frecuente en Dead End. Por razones que eran obvias para cualquiera que las supiera, disfrutaba mucho burlándose del Joker en su prisión. Él también fue francamente salvaje al respecto. Su 'Ding Dong! ¡El payaso ha muerto!' El número musical fue un placer. Pensé que la muerte del Joker dejaría a Jason Todd un poco apático, pero fue como si le hubieran quitado un gran peso de encima.