El estrés de vivir en una ciudad tan ajetreada puede hacerte tomar decisiones tan impulsivas como irte de vacaciones a una isla completamente extraña sin saber absolutamente nada de ella.
Tienes dinero, lo puedes hacer todo ¿A quien no le gustaría...
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—Te he dicho que lo sueltes, por ahora Harua va a caminar junto a mí.— después de que Asakura se llevará al chico de porcelana, una pequeña discusión se desató entre Maki y Nicholas, pues no le parecía correcto que el chico sirena estuviera tan cerca de Shigeta. Lo veía como un descarado sin principios. No le importaba que el era quien los había guiado y "ayudado" a poder llegar con su objetivo. Pues desde un inicio no habían pedido su ayuda, el solo tomó a Harua y empezó a caminar dando órdenes y explicaciónes tontas.
—Nicho-Kun, no sea así, Maki-san no tiene ninguna intención mala.. lo siento en mi corazoncito.— trató de calmar el más bajo de los tres, pues Fuma solo se encontraba cruzado de brazos observando la situación despreocupadamente.
Por otro lado Maki tenía una sonrisa algo burlona plantada en su rostro, pues Harua se encontraba abrazando su brazo, negándose a separarse de él.
—Harua, sabes muy bien que si Yuma estuviera acá, no dejaría que ese tipo estuviera tan cerca tuyo. Hasta estoy empezando a sospechar que el tuvo algo que ver con el repentino desmayo que tuvo Yuma.— habló con voz sería, pero sin exaltarse de más, mostrando "madurez" ante la situación.
—Hey, eso no es cierto, expliqué claramente que eso fue un efecto secundario por el hechizo de Jo, si hay alguien a quien reclamarle es a el, no a mí.— se defendió el rubio cruzando de brazos y dando una expresión indignada.
—¿Y quien me confirma que eso es verdad? Desde un principio trataste de separar a Yuma de Harua, estoy seguro que lo hiciste por otras intenciones y no solo para "ayudarnos"— exclamó, enfrentandolo y acercándose dos pasos más a él cuerpo de Maki.
—¿Pueden dejar de discutir? Es algo tonto.. necesitamos ir con el andrógino que nos dijo Yusuho-san, aquí no solucionaremos nada.— Harua expresó su disgusto, hizo un puchero y frunció su ceño, el realmente no era una persona de mucha paciencia y Yuma lo sabía muy bien, por eso nunca lo dejaba solo con otras personas, pues sabía que él no soportaría tonterías y terminaría estallando.
Ambos chicos mayores se miraron entre sí, y el primero en ceder fue Maki, quien agachó su cabeza y puso sus manos hacia su pecho, mostrando que el aceptaría dejar de discutir. Despues de eso Nicholas no tuvo más opción que tambien aceptar.
La caminata fue incómoda y Harua no estaba junto a ninguno de los dos, decidió caminar al lado de Fuma, quien había sido neutro entre la pelea sin sentido de habían tenido anteriormente ambos jóvenes. El Angel tampoco se negó a que Shigeta caminara junto a él, pues no le importaba mucho y el pequeño chico era un poco bastante encantador como para decirle que no.
—Ya estamos por llegar, quiero que sean muy respetuosos, Él es alguien muy importante.— Habló el que se suponía tenía que ser el mayor de los tres.
Los dos humanos respondieron con un sonido de aceptación, caminando a la par de los dos raros chicos.
Poco a poco se iban acercando a lo que parecía ser un valle, lo cual era algo extraño, pues se suponía que estaban en una pequeña isla a la deriva del mar
