50

2.1K 100 5
                                    

PDV VIOLETA :

En cuanto entre por la puerta de mi casa en granada tanto mis padres como mi hermana corrieron hacia mi.

-Sorpresa... ¿Me habéis extrañado?

-Vio ¿Que haces aquí?- Me pregunto Tana y mis padres también me miraron expectantes a la respuesta.

-Me apetecia veros y necesitaba volver a casa al menos unos días.

- ¿Está todo bien?- Pregunto mi padre mirándome a los ojos y sabía perfectamente lo que estaba haciendo.

-Si, luego hablamos pero si.

-Nos alegra tenerte en casa hija -Dijo mi madre con una sonrisa -Ve a dejar tus cosas en la habitación que ya estábamos a punto de almorzar

-Uy llego y ya me reciben con comida, esto es para celebrar -Dije riendo y fui a la habitación a dejar mis cosas.

Tana vino detrás mío y sabia perfectamente por dónde iban a ir los tiros.

-Vio ¿Realmente está todo bien? Se de otra persona que ahora mismo está en casa de sus padres y no hace falta mucha ciencia para atar cabos.. -pregunto con suavidad, sin intenciones de invadir su privacidad pero dándole a entender que ella estaba allí por si necesitaba hablar.

-Lo está o lo estará no lo tengo muy claro, luego lo hablamos bien pero igual estoy aquí por mi, necesitaba volver a mi.

-Vale tu ya sabes que aquí estoy.

-Lo se, gracias! ¿Tu, que tal?

-Yo bien, muchas gracias!

Luego de dejar todo fuimos a la mesa a almorzar y el almuerzo paso sin mayores problemas, ese día en general fue de tregua, necesitaba primero llegar y aclimatarme y ya luego me adentraria en los temas que debía tratar.

Por la tarde estaba tranquila en la habitación cuando Tana vino a buscarme.

-Vio, están Kiki y Jas en un live ¿Te quieres venir a verlo conmigo?

-Uy claro -Dije levantándome y yendo con Tana.

El live consistía en ellas haciendo covers y hablando un poco, en un momento Jasmine leyó un comentario de Tana y pude notar la reacción de Chiara, hablaba con naturalidad pero en el fondo se estaba dudando si yo estaba allí por lo que instintivamente cogí el móvil y mande los emojis "💋🍒" separados en dos comentarios diferentes, en cuanto los vio se le iluminó la cara pero rápidamente volvió a cambiar, allí habia algo raro, definitivamente, algo le pasaba pero tampoco podía darle muchas vueltas, capaz solo había sido un día malo.

Al día siguiente en la merienda fue el momento de hablar, necesitaba de su padre para sobrellevar esa situación, a fin de cuentas nadie la aconsejaba como el.

- ¿ Cómo haces para hacerle saber a una persona que estás allí pero sin invadir su espacio?

- Pues como me lo acabas de decir ¿Lo dices por algo en concreto hija?

-Por Chiara... es que ella está en un proceso muy especial y quiero estar a la altura para acompañarla

- No voy a decirte nada al respecto de ese tema y lo sabes...

- Ay dale papá, porfa.

-No, no soy tu psicólogo Vio, soy tu padre.

-Pues dame un consejo como padre.

-Confia y sigue tu corazón.

- ¿De verdad no me dirás nada?

-No corresponde que lo haga, no lo hice en su momento cuando más lo necesitabas, no lo haré ahora.

Odio que no te odio - KIVIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora