Odio que no te odio - KIVI

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PDV VIOLETA

Me desperté por la luz solar que pegaba en mis ojos, en ese momento maldeci no haberme asegurado de dejar la cortina bien cerrada. Me removí levemente y en ese momento sentí lo fuerte que Chiara estaba aferrada a mi.

Suspiré  al verla tan relajada pero a la vez con su agarre tan fuerte. No dude en dejar caricias en su rostro y correr el mechón de pelo que me tapaba la visión de su cara.

No quería despertarla, me daba un poco de pena que se despertase porque eso implicaba que el momento de que se fuera llegaría.

También sabía que esa mañana tenía un compromiso que no podía postergar y no podía descuidar el curro por Chiara así que el tiempo que la podía dejar dormir no era tanto.

Me levanté con cuidado y fui a la cocina a preparar el desayuno para ambas y lo deje todo listo en la mesa. Al volver a la habitación deje un beso en la mejilla de Kiki y luego comence a hablarle.

-Kiki, amor venga arriba. En una hora tengo que salir y me has prometido que desayunariamos juntas.

-Un poquito más... Si quieres ve preparando y ya en un poquito voy. -DIjo volviendo a abrazarme acomodando su cabeza en mi regazo.

-Lista, ya dejé todo listo. No me lo pongas tan difícil.

-Jo -Bufo y se sentó en la cama de mala gana, las pintas que llevaba eran muy graciosas, tenía el pelo desordenado y la cara como si acabará de ser despegada de la cama.

-Amor estás guapísima. -Le dije y ella sonrió antes de levantarse e ir al baño para lavarse los dientes.- Kiki cuando estés ven a la cocina que ya está todo listo.

-Vale -Me respondió desde el baño y yo fui a esperarla en la mesa.

Desayunamos tranquilas, sin prisa, nos reiamos y todo fluía genial. La noche anterior nos había venido muy bien, era como que todo seguía igual pero ahora teníamos más claros los límites.

-¿Entonces no me vas a contar que es lo que tramas con Alex para esta noche?

-Si te lo cuento Alex me mata, pero es que si piensas un poco ya lo sabes.

-Me voy a llevar unos clinex para no morir en el intento, porque me vas a destrozar.

- Pero Vio si ahora estamos bien.

-Es que tú la cantas sintiéndola tanto que recuerdo que las veces que ví videos terminaba con rabia porque es que tú no eras la que lo habías hecho mal ni la que tenía que buscarme y me apetecía ser yo quien te la cantase.

- Bueno pero ahora las cosas están bien, quédate con eso.

-Tienes razón, perdón por rayarme otra vez.

-No me pidas perdón por eso tonta.

- Bueno está bien.

Luego de terminar el desayuno nos vestimos y salimos para montarnos en el coche, antes de salir del piso nos despedimos con un pico porque sabía que luego no sería posible.

En la calle Chiara comenzó a caminar hacia el lado contrario a dónde estaba el coche y me extraño.

-Kiki, ¿Para donde vas?

-Iba a tomarme el metro. Si es que vas a llegar tarde al estudio.

-Pero no tonta, si yo curro con Samu hoy y la tengo que buscar de Rus. Vamos que te llevo.

-Ah vale, hubieses comenzado por ahí.

-Es que si me hicieras caso, te lo he dicho antes.

-Si te hago caso, no digas eso.