PROTECTOR

-9.5

Sabía que el día sería el peor y más difícil cuando recibió ese mensaje en la mañana.

Luego de varios días sin poder ir a visitar al Joker  debido a problemas que el Pingüino estaba dando en Gotham más un proyecto muy importante en industrias Wayne, ayer había llegado la noche de la cirugía final, la cirugía dónde le quitarían a Joker su Ostomía.

Estuvo muy presente en mensajes y llamadas con el payaso, siempre diciéndole lo mucho que quería estar con él pero que debido a sus deberes no le era posible visitarlo, prometiendo qué llegaría a la mañana después de la cirugía y lo acompañaría en toda la recuperación.

Justo anoche pudo tener una pequeña charla con él antes de que la cirugía comenzara, Joker se mostró nervioso pero muy feliz de por fin librarse de esa maldita bolsa en su abdomen, y emocionado por poder verlo al día siguiente luego de tantos días. Batman le deseó suerte y le hizo saber que cuando se vieran le llevaría chocolate para que pudiera comer, haciendo a Joker aún más feliz.

Durante la noche Joker estuvo en cirugía mientras Batman se encargaba de frustrar los planes del pingüino, y hasta las 5 de la mañana llegó a su mansión a dormir un par de horas, iría a ver al Joker como a las 10.

Pero cuando despertó lo primero que vió fue una notificación en su celular, era un mensaje, uno que le destruyó el ánimo.

"La cirugía fue un fracaso, no fue posible conectar el intestino y el recto debido a las secuelas del daño sufrido, y no será posible volver a reconectarlo. Por lo que ya es un hecho que la Ostomía será permanente, lo siento.

Doctor Smith."

Solo pudo imaginar el dolor del Joker, ahora tendría que llevar esa bolsa para siempre, maldijo en alto y mostró su rabia arrojando el celular a la pared, luego salió dando pasos pesados hasta llegar a la Baticueva y ponerse el traje, Alfred preguntó qué sucedía Pero fue ignorado y Batman se fue con un odio creciente en su alma.

Iba a Arkam.

Entró como si fuera su casa, los guardias no sabían si dejarlo entrar o detenerlo, era Batman así que seguramente tenía autorización ¿No?

Cuando quiso entrar al área de criminales de maxima seguridad intentaron detenerlo, pero un par de amenazas y billetes logran corromper a estos guardias. Y así fue como llegó hasta donde estaban ellos, entró a la primera celda, los guardias le habían dado la clave de acceso.

Y ahí estaba uno de ellos, más específicamente el que había interrogado antes.

–¿Qué haces aquí?– preguntó ese hombre – ¿Vienes a darme otro sermón sobre que la venganza no es buena? –

Batman no dijo nada, Pero el hombre tardó un par de segundos en adivinar.

– Ah ya entiendo, tú también estás aquí por venganza – dijo, con un tono tan relajado como si no le importara – Puedo leerte, más allá de la máscara puedo ver qué tienes la misma expresión que hice yo cuando ese bastardo mató a mi esposa, así que ya sé que es lo que quieres –

Batman caminó algo apresurado a él y lo tomó fuertemente de la camisa, el hombre rió al ver que tenía razón, Batman apretaba los dientes y echaba fuego por la mirada.

–¿Así que estuviste enamorado de él todo este tiempo y por eso ignorabas todo lo que hacía? ¡Que falso eres!– se burló aquel hombre.

Batman lo lanzó y lo estrelló contra la pared, haciéndolo toser y gemir de dolor, Pero aún así el hombre no dejó de verlo de una manera desafiante.