PROTECTOR

CAPITULO -1

Batman fue llamado por una de las enfermeras, la mujer suplicaba su presencia lo más rápido posible, pues al parecer Joker estaba teniendo una crisis de pánico que no podían solucionar y amenazaba con hacerles daño y hacerse daño a si mismo.

Tuvo que salir de su reunión en la empresa para ir lo más rápido que pudo al lugar dónde lo tenía, Ponerse su traje y esperar que no sucediera alguna desgracia.

Cuando llegó vió a 3 de las enfermeras que había contratado en la puerta de la habitación del Joker mirando hacia adentro muy asustadas.

–¿Qué sucede?– preguntó.

– ¡Señor Batman!– Exclamó una de las chicas – Leslie sustó al señor Joker.

–¿Quién?– preguntó.

Fue entonces cuando un chico salió de detrás de una de las chicas, un joven que se veía aterrado y no dejaba de jugar con sus manos.

Y ahí Batman supo que cometió un error, su intención inicial era contratar únicamente mujeres para evitar esto precisamente. Pero al parecer se le escapó que también hay hombres llamados Leslie, se insultó a si mismo por no haber corroborado mejor los currículums de sus empleados.

–¿Qué hiciste?– Preguntó, sonando más autoritario de lo que quiso.

– ¡Señor Batman le juro que no lo lastimé! – decía el joven, muy asustado – Solo iba a cambiar el pañal pero apenas intenté tocarlo el señor Joker empezó a gritar y a intentar golpearme.

– Nosotras hemos estado cambiando los pañales desde que llegó – Dijo una de las chicas – Pero por hoy Leslie tuvo que hacerlo ya que estábamos ocupadas...–

Batman suspiró, era obvio que el Joker reaccionaría así si un hombre era quién tenía un contacto tan íntimo. En Arkam habían tenido que cedarlo para que dejara que los médicos lo operarán y desde entonces solo había Sido cambiado por mujeres.

Se escuchan los gritos de una de las enfermeras que estaba adentro tratando de calmar al Joker, pero resonaban más los gritos del Joker amenazando con matarla.

Batman entró a la habitación y vió a la mayor de las enfermeras, una señora, intentando mantener al Joker en la cama mientras él luchaba con todas sus fuerzas pararse para huir.

–¡Batman!– exclamó la mujer – ¡No puedo hacer que se recueste! Los puntos se abrirán si no deja de moverse –

Batman hizo una señal para que la mujer saliera y así lo hizo, el Joker aprovechó que la mujer ya no lo sujetaba e intentó ponerse de pie, pero sus piernas no pudieron sostenerlo y cayó al piso. Batman pudo sostenerlo antes de caer por completo, lo cargó a rastras a la cama ya que el payaso no dejaba de forcejear.

–¡Suéltame! ¡Suéltame!–

– Joker, detente–

Intentó acostarlo pero fue inútil, Joker no dejaba de levantarse y moverse como loco, Batman lo tomaba de los brazos e intentaba someterlo pero esto solo empeoraba la situación haciendo al Joker recordar cosas horribles.

– ¡Aléjate de mi! ¡Suéltame! ¡Déjame!–

Sus gritos cada vez eran más fuertes y sus movimientos más erráticos, su pañal estaba algo abierto y con los movimientos se abrió más, y ahí fue cuando Batman pudo ver la sangre, sus puntos se habían abierto.

– ¡Necesito que te calmes!–

–¡Suéltame! ¡Suéltame!–

Batman necesitaba que Joker dejara de moverse tan brusco o de lo contrario terminaría lastimándose más, acercó su mano a la zona del pañal, pero Joker cerró de golpe sus piernas y comenzó a temblar.