Rusia Invocada: El Alzamiento

Capítulo 14.- El fin de la guerra

Gin, Principado de Qua-Toyne 12 de Junio del 2024

Natalia sonrió ante las cámaras, empezando con un tono casi jovial, solo para ser recibida por una mirada incrédula de su camarógrafo y un rápido regaño verbal

- Por amor de Dios Natalia, estamos en Gin ¡GIN! - le recordó el chico

- Mierda, perdón - Natalia soltó un suspiro de cansancio

Estaba estresada, durante el último mes había viajado por Qua-Toyne haciendo una serie de reportajes sobre las costumbres locales, un programa para informar a la gente de rusia por que estaban luchando, que estaban defendiendo
La idea era hacer que la gente sintiera simpatía por los nativos, su forma de vida, y presentar a Louria como un demonio fascista igual o peor que el Tercer Reich, así que, ahora, en estos momentos mientras las fuerzas conjuntas Anglo-Rusas están aplastando los ejercitos lourianos y avanzando implacablemente contra la capital enemiga, estaba en Gin

Gin al principio de la guerra había sido invadida y sometida en poco menos de un día, luego sus habitantes fueron pasados a cuchillo, y los sobrevivientes fueron liberados para esparcir la noticia, poco tiempo despues, las fuerzas rusas llegaron y sacaron a patadas al ejército louriano, prácticamente aniquilándolas, luego de un pequeño barrido del área, se encontraron las fosas comunes donde los pobladores de Gin habían sido enterrados, luego, El Imperio Británico y la Federación Rusa habían reactivado la ONU, desplegando una fuerza de soldados de la paz en la zona, para estabilizar la región fronteriza de Qua-Toyne y las zonas devastadas de Louria

El Ejército Qua-Toynese había sido traslado en gran parte para ayudar a las tropas rusas en las labores de guarnición, y sobre todo, dejarles liberar cualquier odio o rencor contra Louria, Natalia se estremeció ante eso, conocía a Andrey Kotov, era el padre de Alek sobre todas las cosas, y también al ministro de defensa, Vladimir Makarov, sabía que ambos no tenían exactamente un corazón benévolo ante sus enemigos, miro una vez más a la cámara indicando que esperara un poco más 

- Lista - dijo la chica recomponiendose, en vez de la sonrisa mostraba una expresión más seria, el hombre asintió y despues de contar hasta 3 con la mano le indico que comenzará - Buenos días gente de Rusia, hoy transmito desde Gin, la primera víctima de esta guerra... - observó como el camarógrafo dirigía la cámara hacia las ruinas a sus espaldas

Un paisaje derruido, casas quemadas, destruidas, la bandera de rusia ondeando en medio de un campamento, al lado la bandera de la ONU y la Britana, murallas derruidas, y una pesadez en el aire, el ruido del viento al soplar débilmente agitando las ramas de los árboles, empezó a caminar acercándose a la plaza seguida del camarografo, una vez en la plaza se giro para encontrarse nuevamente frente a la cámara

- Como pudieron observar, la devastación en esta ciudad es una sin precedentes para nuestros aliados de Qua-Toyne, por que no solo han perdido unas cuantas casas, o unas cuantas paredes, no camaradas, lo que Qua-Toyne perdió fueron personas, víctimas de la masacre premeditadas de las fuerzas de Louria - Natalia se giró para señalar la fuente central de la plaza - Miren como es la ciudad hoy en día, vacía, destruida, sin vida, todo esto a causa del gobierno despótico del Reino de Louria, un gobierno de corte fascista que debe ser destruido a cualquier costo, sea nuestro o de ellos - indicó, volvió a caminar, rumbo al campamento de la ONU

Las calles vacías salvo por patrullas ocasionales de soldados, que llevaban balaclavas para cubrir su rostro de las cámaras, eran algo melancólicas, recordaba ciertas películas de la segunda guerra mundial, ciudades enteras devastadas, defensores soviéticos dando todo de sí para mantener la línea, para darle un segundo más de vida a la abrumada Unión soviética mientras los panzers alemanes destrozaban cualquier resistencia en su aparentemente imparable avance hacia Moscú, sin embargo, actualmente rusia tenía los medios para defenderse, ya sea de los alemanes, los americanos o los occidentales, un montón de matones con palos y piedras no sería un problema