cambiaremos nuestro destino

capítulo 5

El Invierno había llegado y los árboles quedaron totalmente sin hojas, las temperaturas llegaban a los menos cero grados, y en la escuela de hechiceria preparaban una fiesta para celebrar navidad entre los alumnos y profesores

Se habia propuesto que realizarán una cena para todos sin embargo los altos mandos tenían otros planes de los cuales suguru y satoru no tenían idea.

(Shoko leiri)

Invierno una de las temporadas más hermosas e insoportables, me encontraba acostada en mi habitación cubierta con cobijas tapando todo mi cuerpo Incluso asta la cabeza, aquel día se encontraba con una temperatura muy baja y al ser mujer tendría aún más frío por el uniforme, me preguntó ¿por qué en estas temporadas debemos ir a la escuela?, Suguru me habla dicho que necesitaba mi ayuda en algo que iba hacer el 24 de diciembre sin embargo no me dio detalles de aquel comentario. Realmente no queria levantarme con el frío que hacía pensé en que el profesor yaga debería poner uniforme de invierno para mujeres.

-puedo pasar-eh, quién es no pude identificar su voz.

-adelante, entra-

-shoko, no piensas ir a clases el viejo te puede regalar-

-tengo demasiado frío como para ir, gojo-

-ah, ya veo, es dificil tener el uniforme en esta temporada, aún más para ti que usas falda -

-si, pero que le vamos hacer,  tengo tanto frío que ni ganas de fumar tengo -

-eh? Vaya eso sí es novedad-

Gojo camino hada mi cama sentendose en ella, algo tenía que preguntarme siempre que me hablaba de esa forma era por qué quería mi opinión sobre algo, aún que está vez no se de qué era el tema anteriormente antes que me preguntará yo ya sabía del tema, ese día me encontraba en blanco.

-shoko, yo... quería preguntarte sobre algo- este comenzó a mover sus manos en señal de nerviosismo
que no era común en el.
-bueno dime qué sucede -

-es que me gusta alguien pero ese alguien también le gustó pero ese alguien piensa que yo no enterado pero ya se que le gustó a ese alguien y yo quisiera decirle a ese alguien que me gusta pero no decirle a ese alguien que me gusta sin decir que se que ese alguien le gustó-
-espera...¿Que? No comprendí desde el inicio-
-¡que me gusta suguru! Shoko-
-¡ehh!desde ¿cuándo? -
-eso es lo menos importante quisiera saber como le podría decir el 24 que me gusta sin sentir miedo al rechazo -
-el poderoso Satoru Gojo tiene miedo a ser rechazado, es una clase de broma-
-es que...-
-solamente dile lo que sientes si quieres hacer romántica la declaración lleva flores o llévale una rosa roja y una caje de chocolates, y no lo pienses demasiado solo dilo-
-Si Eso haré gracias shoko-
-le diré ¡Me gustas mucho!, quieres ser mi pareja -
-bien, ahora préstame tu suéter que tengo frío -
-¿Eh?, está bien toma-

Después de aquella conversación gojo comenzó a hablarme más seguido, me preguntaba cosas que el podía hacer aquel día y yo le daba mi opinión, tal vez me agradaba un poco ayudar a gojo pues el solamente me consideraba como una conocida que como lo que era realmente, su amiga de la escuela.

Durante aquel periodo geto salía de la ciudad a realizar misiones de grado bajo, cuando esté se iba gojo aprovechaba para buscar en los alrededores de la escuela un buen sitio para declararse a geto me parecía un idiota al hacer eso sin embargo sabía que ellos eran uno para el otro.

Haibara un chico alegre que siempre me hablaba cuando nos encontramos, habia ingresado a la escuela de hechiceria junto a otro llamado nanami ellos se habían vuelto mejores amigos aún que eran totalmente diferentes con respecto a su personalidad, mientras que haibara era alegre siempre ayudando a los demás y teniendo una sonrisa en su rostro nanami era todo lo contrario este siempre mostraba una cara sería no mostraba sus emociones y ayudaba cuando el quería, además de ellos la señorita utahime quién para misiones no era muy útil y meimei una persona que estaba obsesionada con el dinero, ellas se habían convertido en amigas mías sin embargo meimei cuando conoció a gojo lo miraba con otros ojos este la ignoraba ante sus comentarios, según palabras de gojo.

-¿meimei? Es una interesada por el dinero, según muestra interés por mi pero en realidad está interesada en lo que tenga en mi cuenta bancaria-
-asi que no le darias oportunidad de salir contigo ni una vez-
-¿Que? Claro que no me interesa, ella ni nadie que no sea suguru-
-es una lastima gojo-
-meimei que haces aquí-
-vine a buscar a shoko pero me resultó interesante su plática y ahora estoy triste con el saber que crees que solamente me importa el dinero-
-si... disculpa por el comentario que te hice-

Meimei no dijo nada y solo siguió caminando gojo volteo a verme y suspiro para después reírse de la situación, yo solo pude ver cómo ella seguía con su vida como de costumbre al igual que gojo.

El día de la fiesta había llegado y me encontraba con haibara y utahime bebiendo jugo de naranja, al ser una alumnos no teníamos permitido el consumo de alcohol.

-shoko que tienes te vez triste-
-pensé que al ser una fiesta habría alcohol sin embargo me he equivocado-
-shoko siempre piensas en alcohol cuando son fiestas-
-pero está bien hay personas que no toleramos el alcohol-
-lo dices por ti haibara-
-si en realidad yo no lo tolero como tú-

La noche era hermosa aquel día creo que gojo tenía todo a su favor pues esa noche sería en la que se le declararia a geto, solo esperaba información de lo ocurrido, había pasado ya cuatro horas y no había señales de los idiotas tal vez ni siquiera estaban en la escuela de hechiceria, mientras hablaba con haibara y utahime pensaba en lo que había ocurrido con el par de idiotas.

Nanami se encontraba platicando conmigo sobre su última misión y de como haibara casi terminaba muerto por aquella situación.

-nanami me protege y más cuando me encontro herido, el es un gran amigo no crees shoko-
-si, es un buen amigo -
-pero aún que sea un buen amigo deberías cubrirte la espalda haibara tal vez yo pueda protegerte cuando tengamos misiones juntos pero cuando estés solo quien te ayudará -
-ya lo sé pero es que me distraigo fácilmente en las peleas -
-no deberías distraerte de esa forma -

Cuando menos te das cuenta esos momentos quedan como recuerdos obscuros del pasado, y deseas con todo tu ser el volver a ver y hablar con ese pasado atormentado, me preguntó que fue lo que hice como para merecer tanto dolor y tanta soledad, creo que nadie sabe lo que va pasar en el futuro.