Manada Park #18

Capitulo 4

Kyuhyun iba a matar a Yunho, ahora era seguro. ¿Cómo se atrevía a seguirlo a la casa de su pareja? —Quédate con Sungmin.

Él no quería que hubiera testigos si el cambio ocurría. Su pareja ya tenía suficiente con tener que manejar este difícil asunto tal y como estaba.

Kyuhyun cerró la puerta de la recámara detrás de él. Apoyó la mano en la pared un momento y apoyó también la frente, haciendo su mejor esfuerzo para recuperar algo de control. Eso no estaba funcionando. Realmente, realmente no funcionaba.

Tenía que encontrar la manera de sacar a Yunho porque él no compartía. No en esta vida ni en la siguiente. Kyuhyun no compartiría al más hermoso hombre que había visto.

Tomó una profunda respiración y calmadamente se dirigió a la puerta del frente. La calma era buena. Podría morder a su hermano calmadamente.

Kyuhyun tomó la perilla y la giró, abriendo la puerta, igualando su mirada de ira con la de Yunho.

—Quiero a mi pareja. —Yunho lo empujó, girando la cabeza buscando alrededor del cuarto.

—Él no es tu pareja. Ahora saca tu culo de aquí antes de que haga algo que Minho lamente, porque yo no lamentaré ni una jodida cosa. —Kyuhyun señaló la puerta, su mirada exigiéndole a Yunho que saliera.

—¿Kyuhyun?— Jaejoong salió del cuarto de Sungmin, su mirada iba de Kyuhyun a Yunho.

Kyuhyun maldijo. No tenía tiempo para esto. ¿Podía alguien oír una maldita palabra de lo que había dicho hoy?

Él se llevaría a Sungmin, oh infiernos, a Jaejoong también tenía que sacarlo de aquí. Dado que el hermanito era menor de edad ahora era responsabilidad de Kyuhyun. Kyuhyun vio a Jaejoong y a Yunho y vio la chispa de la conexión.

Oh hombre, no era Sungmin por quien iba Yunho.

Era el aroma de Jaejoong pegado en Sungmin lo que hizo que Yunho perdiera la cabeza.

Sacudió la cabeza, sintiendo la migraña formarse. Iba a ser extremadamente difícil explicarle eso a su pareja. «Hey, mi hermanito es pareja de tu hermanito así que siéntate y relájate, hagamos palomitas de maíz». No.

—Mío. —Yunho se abalanzó y tomó a Jaejoong de la cintura jalándolo hacia su pecho.

—Quita las garras de él. —Sungmin salió del pasillo, jalando a Jaejoong con toda su fuerza—. Suéltalo —repetía mientras lo jalaba.

—Mío. —Yunho estaba atorado en solo esa palabra.

—Él tiene diecisiete. ¿Eres un pervertido? —Sungmin y Jaejoong, ambos cayeron de culo cuando Yunho abruptamente lo soltó.

Kyuhyun se inclinó y ayudó a ambos a ponerse de pie. No podía admitirlo en voz alta, pero se sentía aliviado de que fuera Jaejoong y no Sungmin a quien Yunho quería.

No iba a admitirlo en voz alta porque Sungmin iba a enloquecer con eso y él no quería regresar a eso.

—No, no soy un pervertido —Yunho se defendió—. Pero...él es mío —agregó con un gemido y un puchero.

—Él no es tuyo así que mantén tus manos fuera de él. —Sungmin miró fijamente a Yunho y empujó a Jaejoong detrás de él. Jaejoong asomó la cabeza por detrás del cuerpo de Sungmin, viendo con los ojos bien abiertos a Yunho.

Kyuhyun vio a su hermano y a su pareja viéndose el uno al otro. Si, él iba a tener una migraña.

Yunho se giró hacia Kyuhyun. —Siento haber asustado a tu pareja. Honestamente no tenía ni idea. En todo lo que podía pensar era en ese olor.