Kyuhyun giró por la esquina un segundo demasiado tarde. Vio con horror cómo el Elf de las Sombras y una perra con una loca mirada desaparecían llevándose a su pareja, a Jaejoong y a Melonee.
—¡Chanyeol! —gritó. El pánico lo abrumó. Sus caninos descendieron, sus garras salieron y sus ojos cambiaron a carmesí.
Chanyeol salió corriendo desde su oficina. Kyuhyun señaló el punto en el que los tres desaparecieron. —Algún jodido hada y una loca perra desaparecieron con mi pareja, la de Yunho y Melonee.
Chanyeol rugió. Su expresión era de ira pero no tanta como la de Kyuhyun. Sung y su hermano eran humanos, nunca antes habían visto lo paranormal, y ellos probablemente estarían tan asustados que se volverían locos. Quería matar al bastardo azul y a su asistente.
—¡Taemin! —Chanyeol gritó al techo.
Un hombre con apariencia etérea apareció, hermoso en todo el sentido de la palabra. Muy mal que el elf fuera la pareja de Minho, el hermano de Kyuhyun. Ese conocimiento mataba cualquier momento de inspiradora-veneración que se pudiera tener al ver a Taemin.
Eso y la boca del hombre. Él era el más grande engreído de por aquí.
—¿Llamó, su alteza?
Chanyeol gruñó ante el Elf de los Bosques. Kyuhyun sabía cómo se sentía el Alfa, pero desafortunadamente no se permitía matar a una pareja. —Papá Pitufo se llevó a dos parejas humanos junto con Melonee. ¡Encuéntralos!
La expresión de Taemin cambió totalmente. Visiblemente tragó, asintió y desapareció.
—¡Nunca vuelvas a hablarle así a mi pareja de nuevo! —Minho gritaba mientras bajaba corriendo las escaleras.
Chanyeol levantó su muy grande mano. Era del tamaño de un maldito plato. —No quiero oír esa mierda. Las parejas de tus hermanos y Melonee fueron secuestrados. Tu jodida actitud puede esperar.
La cabeza de Minho se giró hacia Kyuhyun y Yunho, un bajo gruñido vibró en su pecho. —Estoy harto de ese jodido hada azul. Ren juró que la guerra había terminado.
Kyuhyun negó con la cabeza. —Este no era el mismo tipo azul. Este era alguien más. —Estaba listo para desgarrar algo. Quería a Sung de regreso y no la continua fricción entre su hermano y el Alfa. Kyuhyun sólo estaba preocupado por encontrar a los tres y matar al bastardo azul.
Chanyeol lanzó la cabeza hacia atrás una vez más y gritó. ―¡Ren!
Kyuhyun estaba impresionado. El elf azul asustaba a muerte, pero no a Chanyeol. Estaba gritándole como si él y Ren fueran conocidos de mucho tiempo.
—Te dije que nunca me llamaras —el elf azul le gritó a Chanyeol.
—Sí, lo haré si uno de tus pitufos se roba a tres de los míos. ―Para ser honestos, si el hada no fuera malditamente perverso, el largo cabello blanco que fluía era impactante en contraste con la piel azul.
Claro, nadie era tan impactante como su pareja, pero Kyuhyun le dio una directa mirada a Ren.
A Kyuhyun no lo tranquilizó que Ren le diera a Chanyeol una mirada intrigada. —Dije que la guerra había terminado. Ninguno de los hombres de mi tribu debería de involucrarse en nada contigo o con los Elves del Bosque. —Ren bufó en la última parte.
—Supongo que no todos recibieron tu memo. Los quiero de regreso, o la guerra que acaba de terminar será un juego de niños comparada con mi ira.
—¡Quiero a mi jodida pareja, ahora!— Kyuhyun le gritó a Ren. A él no le importaba lo atemorizante que fuera. Sung no estaba y lo quería de regreso.
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Manada Park #18
RomanceLee Sungmin siempre pasó suavemente por la vida, sólo se divertía y cuidaba de su hermano menor, Jaejoong. Él disfrutaba ser quién era, hasta que hablaba con su mamá, su propio crítico personal. Quien era feliz recordándole todos sus defecto...