¿Se había despedido con un beso en la mejilla? No podía parar de pensar en eso, es algo que los italianos hacen... Supongo. Pero nunca antes me había despedido así.
—¡Alya! Te estamos hablando —George frunce el ceño.
—¿En qué piensas tanto?
—Nada nada, ¿Qué me decían?
Ellos se miran entre sí y levantan una ceja.
—¿No estarás enamorada?
—¿Por qué siempre piensan que lo que me sucede tiene que ver con el amor? —me río— solo estoy pensando sobre los exámenes...
—Claro sí, y George y yo nacimos ayer.
Pongo los ojos en blanco y sigo comiendo mi desayuno.
—Cedric últimamente te mira mucho... ¿Volvieron a hablar o algo? —dice George viendo detrás de mí.
—¿Eh? No —miro hacia atrás y veo a Cedric mirándome.
Él desvía su mirada y sigue en lo suyo.
—Que raro...
Me volteo y sigo comiendo.
—Como sea... ¿Vamos juntos al partido de hoy? —pregunta sonriendo Fred.
—Iremos con Her, Ron, Harry y Ginny.
—¿Y Luna?
—Claro, que venga.
—De acuerdo —sonrio y seguimos charlando por un rato hasta que volvimos a clases.
Como de costumbre me siento con Nott, estábamos en defensa contra las artes oscuras.
—Supongo que irás a verme hoy, ¿No?
—A tí no, a Blaise —le sonrío.
Blaise se voltea y le sonríe a Theodore, me río bajo. Que metido.
—Que bueno que el partido sea de día, sino difícil que lo veas —bromea Theodore.
El chico que se sentaba junto a Blaise soltó una carcajada y yo sonreí tratando de no reírme.
—Ey —se queja Blaise ocultando su risa.
Entra el profesor y comienza la clase. Nos estaba hablando de que en poco tiempo comenzaría el torneo de los tres magos y que recibiríamos a dos escuelas de magia muy importantes, cosas a las que no presté mucha atención y solo dibujaba garabatos en una hoja.
—¿Entendió señorita Lestrange? —noto al profesor enfrente mío.
—Por supuesto.
—¿Qué acabo de decir?
—Que vienen alumnos y alumnas de colegios muy prestigiosos, que hay que dar una buena impresión y que los tratemos bien. También sobre el torneo.
—¿Y qué más?
—¿Más? —pregunto confundida.
—Baile —susurra mi compañero de asiento.
—¿El baile?
—La próxima sin ayuda, Lestrange —se da media vuelta y camina hacia adelante.
—Li priximi sin iyidi —lo imito, me caía mal.
Nott sonríe y me susurra al oído —Me debes una.
—Tú me debes dos desde hace meses y todavía no te las he cobrado —lo miro divertida.
Theodore parece recordar y sonríe.
—Estoy a tu servicio mia regina. (Mi reina).
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Promesa del amanecer «Theodore Nott»
FanfictionTheodore Nott y Alya Lestrange, dos chicos similares pero opuestos. Una promesa que podría romperse, o romperlos a ambos.