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—¡¿Usted es el guardian que proteje este lugar?! Si es necesario... ¡Lucharé contra ti para llegar al poderoso dragón!— Dijo Arturo con mirada decidida —. ¡Haré lo que sea por Camelot!
Arturo estaba adelante de Elizabeth y Hawk con su espada en mano, mirando a lo que sería un poderoso "guardian" según Merlín. A su lado, estaba Gowther sin prestarle mucha atención a las palabras dichas por Arturo.
—¡S-señor Gowther, no sé acerque! ¡Puede ser peligroso!
Zane estaba viendo esta situación con tranquilidad, sin comprender demasiado lo que habían dicho los desconocidos. Gowther camino a él con tranquilidad y le puso una mano en el pecho de Zane.
Se escuchó un grito agudo de los demás presentes.
—Hola Zane. El capitán te necesita.— Murmura sin expresión alguna, sin mover su mano.
—¿Qué?
—¡¿E-este tipo es el "gran dragón" del que Meliodas hablaba?!— Zane tuvo que parpadear más de una vez para asegurarse de que no seguía soñando, ¿un cerdo que habla? Le hizo acordar unos segundos a Wandle.
—¡D-disculpe mi falta de respeto! Usted es el amigo de Merlin, ¿verdad? Lo siento, creí que cuando dijeron que era un dragón se refería a uno como en los cuentos...— Murmuró tímidamente Arturo.
—¡Por favor discúlpenos, señor Zane! Lamentamos haber entrado a su territorio sin permiso. Pero Brittania necesita toda la ayuda posible— Finalmente habló Elizabeth, la reencarnación de la diosa que alguna vez fue su amiga. Le dolía saber que su amigo, Meliodas, volvería a sufrir cuando ella muriera.
Zane simplemente les dedicó una mirada sería a los tres, que se suavizó con Elizabeth. Y luego miro a Gowther con una sonrisa tranquila, quitando la mano del Pecado de la Lujuria de su pecho, y agarrándola para pesarla suavemente.
—Han pasado diez años desde la última vez que nos vimos. Me alegra verte a ti, y espero lo mismo de los demás pecados— Habla Zane con voz tranquila, mientras los tres más pequeños se sentía ignorados.
—Merlin y Meliodas te buscan. Hay nuevos enemigos— Dice Gowther, con su expresión habitual sin emociones.
—Senti una energía negativa hace unos días, ¿Demonios? ¿Los diez mandamientos?
—¿Los conocías?— Gowther fruncio el ceño.
—Tal vez.
Zane se dió la vuelta, viendo Elizabeth.
—Llevame con Meliodas, por favor.
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