Capitulo Cuatro
“Las fiestas”
Estar sentado en la biblioteca completamente solo y en un harmonioso silencio era lo ideal para una siesta que necestiaba urgentemente, era la séptima vez que bostezaba en todo el dia mientras mis ojos me suplicaban cerrarse por tan solo unos segundos. No entendía si Harper estaba tardando mucho en llegar o si el tiempo realmente estaba corriendo demasiado lento, quizás eran las pocas horas de sueños las que me pesaban ahora mismo o quizás era porque no tenia nada en qué pensar, mejor dicho, no quería pensar en algo, porque me llevaría a un montón de preguntas que difícilmente respondería con certeza y que probablemente me llevaría a perder la cordura que aún me quedaba y que poco a poco parecía ir alejándose de mí.Preguntas. Eso era lo único que parecía estar en mis pensamientos todo el tiempo. Eso era de lo que
quería escapar. Porque desde que llegué aquí siento que algo en mí ha cambiado, algo que aun no lo
sé pero que finalmente terminaría descubriéndolo. Jamás había tenido tanto en qué pensar que no fueran en los exámenes finales o un pequeño debate mental sobre los regalos de Navidad, me sorprendía hasta a mí mismo el corpontamiento que estuve adoptando los últimos días ya que tan solo han pasado unos cuántos días desde que he llegado y mi estado mental en un lio en este momento, y hasta ahora, existía una única razón por la cuál me encontraba así, y era por tan solo una absurda nota de un anonímo.Sé que debería tomarme aquella nota como una estupidez, pero realmente no podía, no podía dejar de pensar en ello, no podía dejar de hacerme una pregunta tras otra, especialmente, no podía dejar de pensar sobre quién era el anónimo. Quería saber quién era y por qué me mandaba notas en mi
mochila, ¿qué es lo que realmente quería? ¿Realmente estaba interesado en saberlo? Ni siquiera sabía si le estaba dándo demasiada importancia al tema, pero cada vez que el asunto viene a mi cabeza muy dificilmente se iba con rapidez, y una vez que ya no estaba atormentándome vuelve a
aparecer generando un montón de confusiones en mi mente, creo que me volveré loco. Comienzo a creer que cambiarme de escuela ha sido un error, que este no es un nuevo comienzo, sino que es una tortura, es un cambio en mí y especialmente me está afectando mentalmente y mucho. No sé que es lo que realemente esté pasandome pero terminará conmigo si sigo aquí. Pero ya no hay vuelta atrás.Tomé mi cabeza con mis dos manos intentando tranquilizarme, me despeiné el cabello y me froté
los ojos con fuerza intentando que el sueño se fuera lejos, pero lo único que provocó fue otro bostezo. Al levantar mi vista me encontré con aquella cabellera rizada a espaldas de mí, estaba a unos cuántos metros y no parecia que estuviera solo. Inconscientemente me quedé mirando la escena, se estaban besando, pero en realidad creo que mis ojos no admiraban la escena, sino a él. A ese mismo chico que me dió el candado que ahora estaba engañando a su pelirroja novia con una morena. Había algo en él, sentía... algo, pero con tantas cosas en la cabeza no puedo entender muy bien qué es. Debo de estar demasiado mal como para sentir algo por un completo desconocido que tan solo me ha dado un candado. Pero para una parte nueva de mí significa algo más, aquella parte se está adueñando de todo mi ser dándole un giro completo mientras yo estoy mucho más que mareado, haciéndome sentir que estoy perdido, perdiéndome.-Disfruntando el momento ¿eh?- dijo una voz femenina sobre mi oído haciéndome asustar, giré mi vista hacia ella para comprobar que era Amelia, y no estaba equivocado. Intenté disimular mi sorpresa pero no funcionó, reí nervioso a lo que ella me contesto con una tímida risa.-¿Qué haces aquí solo en la biblioteca mirando como unos babosos se besan?- preguntó divertida provocando que riera al pensar lo patetíco que me vería.
-Espero a Harper.- respondí, aunque creo que ya había olvidado por un momento por qué estaba
aquí.-Oh. ¿Harper es tu...- no le dejé terminar la frase con un “no” de respuesta.-Ops, lo siento, pensé
que ella lo era ya que los he visto juntos pero creo que es bueno saberlo.-