Tamed Wolf (FukuAra)

Ride 11

~ARAKITA~

Lo había hecho, lo había dicho, me sentía como si me hubiera quitado un eso de encima, pero a la vez sentía tanta vergüenza que pensé que iba a estallar ¡¿por qué demonios me tenia que sentir asi?! Estaba todo correcto no... pero no me atrevía a abrir los ojos, no se el motivo, tal vez no quería ver su cara de piedra, su indiferente cara de piedra quiero decir, ese maldito, sabia como molestarme...

-Arakita... -le oí llamarme.

-¡CALLATE! -solté sin dejarle terminar. -¡mira las cosas mas vergonzosas que me haces decir! ¿estaras contento?

-Si... -le oí decir con su habitual seriedad, abrí los ojos finalmente, ¡otra vez esa maldita cara!

-¡PUES DEMUESTRALO O ALGO! ¡LA GENTE NORMAL SONRÍE CUANDO ESTA FELIZ JODER! -salté en furia, tal vez le estaba pidiendo demasiado, pero que solo es una maldita sonrisa, bueno, tampoco es que me haya enamorado por ella, a mi me gustaba por como era pero una mínima muestra de afecto no le venia mal a nadie digo yo...

-Algo así... Es complicado, y mas si es forzado... Me cuesta -¿no me digas? Me había dado cuenta idiota.

-Si... si... -solté con aire desganado. -Me gustas por como eres Fuku-chan, dejalo. -solté con un ligero sonrojo, a mi me costaba decir aquellas cosas.

~FUKUTOMI~

-Si... si... Me gustas por como eres Fuku-chan, dejalo. -estaba totalmente nervioso al decir lo ultimo, resultaba muy mono verlo así, lo decía en bajito para ver si tenia la suerte de no oírlo, pero, no, lo oí, la verdad es que una de las cosas mas bonitas que me habían dicho... De repente, el moreno me miro de reojo, y de repente se sorprendió girándose del todo. -¡WOW!¡UNA SONRISA! ¡LO HAS CONSEGUIDO FUKU-CHAN! -¿una sonrisa? Me sorprendí llevándome una mano a los labios... si, era una sonrisa, ¿cómo? ¿cuándo? Ni yo me habia dado cuenta, pero la verdad es que Arakita parecía emocionado, ya entiendo, es por él...

-Es por ti Araki...no, Yasutomo. -le vi poner una expresión sorprendida mientras se sonrojaba en cero coma un segundo, di un paso hacia el, avanzando con firmeza hacia mi meta, que en ese caso era el. -Ven conmigo, ahora... -trate de agarrar su mano pero se deshizo del agarre intentando tapar su rostro...

-¿QUIEN TE CREES? -¿como? -Vienes aquí, me dices todas esas cosas, me haces decir cosas vergonzosas, ¡y ahora dices que sonríes por mi! ¡¿QUIEN TE CREES PARA HACERME SENTIR ASÍ?! ¡IDIOTA¡ -ya lo entiendo... ya lo entiendo todo...

-Tu novio... -respondí con firmeza.